viernes, 11-10-2024
“El término “cultura de resistencia”, por lo general, no se encuentra claramente definido en los estudios de autores latinoamericanos, sino diluido en los análisis del problema de la identidad, la liberación, la cultura política, etc. Con frecuencia se hace referencia a la resistencia como acción, confundiéndola con momentos de supervivencia. Se valoran aspectos particulares de la resistencia, manifestada en todas las esferas de la vida social (resistencia política, económica, armada, ideológica, etc.); pero se encuentra menos el enfoque que la caracteriza como un esquema de pensamiento, como proceso cultural, aun en formación…”
“Se afirma que, si bien en cada país los inmigrantes han sido incorporados al sistema social, educativo, laboral y político de diferente manera, al no ser ciudadanos por nacimiento en un territorio nacional y no compartir la identidad cultural mayoritaria, se mantienen políticamente marginados. Ante los crecientes flujos migratorios hay dos dimensiones de este tema. Una es si es posible excluir y marginar de derechos a quienes no han nacido en el Estado-nación; la otra, si se considera que quien decide emigrar de su país de origen pierde sus derechos políticos, a pesar de que en muchos casos mantiene con él fuertes vínculos sociales, culturales y económicos. Estas interrogantes corresponden a los desafíos filosófico-políticos de un mundo globalizado, pero sobre todo representan un cambio profundo en la definición de membresía política…”
“La decisión de emigrar y la condición de emigrado se convirtieron durante muchos años en la entrada a una zona marginal innombrable que no tenía cabida dentro de la Revolución. De hecho, ya estaba fuera, incluso geográficamente. Las circunstancias históricas nos jugaron una mala pasada y cobraron en este asunto un sentido negativo, afectando a instituciones básicas de la sociedad, como la familia, y provocando la fragmentación de la identidad cultural, la misma identidad que el proyecto cinematográfico nacional se proponía rescatar y redimensionar. Si bien varios largometrajes también se acercaron, aunque de manera anecdótica, al tema de la emigración en estos años; y algunos con implicaciones mucho más sugerentes, interesantes y de una profundidad sorprendente, en realidad, en treinta años de cine cubano revolucionario la problemática de la emigración solo aparece como tema central en una sola película de ficción…”
“¿Cómo explicar el éxito global de Buena Vista Social Club? Se calcula que, en términos de ventas e interés publicitario, no hay disco o filme comparable en la historia cultural cubana. Las nominaciones y premios internacionales que ha recibido ya suman unos treinta, entre ellos el de finalista en la categoría de mejor documental para el Oscar. La cinta cinematográfica también ha motivado más de una centena de reseñas en Europa, los Estados Unidos y América Latina, todas ellas extraordinariamente laudatorias, aunque en su mayor parte solo atestiguan una sensación de encanto que nunca llega a dilucidarse por completo. Cabe preguntarse cuál sería la mejor forma de acercarse a un fenómeno tan súbito y de tal magnitud. ¿Existe una estética o política cultural capaz de apreciar sus complejidades culturales y comerciales, tanto en el contorno nacional como en el transnacional?...”
“Más de cuarenta años de cambios radicales en Cuba, como resultado de la Revolución de 1959, y más de treinta de existencia de ascendentes comunidades de emigrados cubanos en los Estados Unidos, así como en diversos países —España, Venezuela y México, entre otros—, en menor medida y tiempo, han provocado un importante proceso de inclusiones y exclusiones en la identidad cultural cubana, que no siempre se reconoce por las partes involucradas. La reinterpretación y reconceptualización de la identidad cultural cubana, en todas sus dimensiones, es una necesidad teórica y práctica, en Cuba y en su diáspora…”
El texto pretende comprender cómo la globalización se está delineando en la esfera cultural, específicamente en el fútbol, que a partir de los años 30 y los 40 fue incorporado como uno de los elementos de la nacionalidad brasileña y ha sido caracterizado por sus pensadores como portador de una identidad propia que lo distinguiría frente a otras naciones. En ese sentido, cabe preguntar si, frente a un mundo globalizado, este deporte ya perdió la identificación como el «alma nacional» o si esta persiste, «sirviendo» como producto cultural brasileño (si es que podemos llamarlo así) que, por bueno, es mundialmente exportado.
YOUTUBE
TWITTER
FACEBOOK
Temas es una publicación trimestral, dedicada a la teoría y el análisis de los problemas de la cultura, la ideología y la sociedad contemporánea.
(+53) 7-838-3010(+53) 7-830-4759
temas@icaic.cu
Calle 23 #1109 e/ 8 y 10. Plaza de la Revolución. CP:10400. La Habana. Cuba