“El término “cultura de resistencia”, por lo general, no se encuentra claramente definido en los estudios de autores latinoamericanos, sino diluido en los análisis del problema de la identidad, la liberación, la cultura política, etc. Con frecuencia se hace referencia a la resistencia como acción, confundiéndola con momentos de supervivencia. Se valoran aspectos particulares de la resistencia, manifestada en todas las esferas de la vida social (resistencia política, económica, armada, ideológica, etc.); pero se encuentra menos el enfoque que la caracteriza como un esquema de pensamiento, como proceso cultural, aun en formación…”