“La problemática que abordaremos en este trabajo posee dos caras. La primera y principal tiene que ver con un conjunto de creencias, imágenes, símbolos y metáforas modernas acerca de la vida, la identidad, la otredad y el lugar de lo limpio y lo blanco, en contraposición a lo bajo y oscuro, pero también a lo sucio. La segunda se fue cribando desde el campo de las culturas subalternas, y logró resemantizar o carnavalizar los sentidos estigmatizantes de los discursos y creencias higienistas y escatológicas de nuestras burguesías y oligarquías latinoamericanas…”