(Fragmento del prólogo a Misiones en conflicto, de Piero Gleijeses, Editora Política, La Habana, 2003)
“Desde 1965, cuando el Che y sus trece compañeros pisaron suelo congolés después de cruzar el Lago Tanganika, hasta el regreso definitivo de nuestras tropas en África, transcurrió un cuarto de siglo más un año, un mes y un día. En estos veintiséis años no hubo un solo día en que los combatientes cubanos dejaran de empuñar el fusil en África. Desde hace cuatro décadas, nuestros médicos y demás trabajadores de la salud prestan sus desinteresados servicios en África. Primero fueron decenas, luego cientos, hoy son miles y cada día serán más. Hay decenas de miles de profesionales y técnicos que están dispuestos a llegar hasta el más apartado rincón del continente para prevenir y curar enfermedades y trasmitir sus conocimientos en facultades de medicina y escuelas de enfermería, en cada país que lo requiera. Es así, de conjunto, como hay que analizar la epopeya cubana en África…”