“¿En qué contexto se ha abierto el debate racial, en qué punto está y cómo lo condiciona? Para formular algunos juicios en torno a estas preguntas tendré en cuenta, al menos, tres ejes que configuran una especie de sistema tridimensional de relaciones complejas en el que se desarrolla el fenómeno. El primero tiene que ver con el espacio y el tiempo desde el punto de vista internacional, y la posición de Cuba dentro de ellos. El segundo incluye las características y determinaciones de la sociedad cubana en cada momento histórico y los cambios operados en ella. El tercero se relaciona con las expresiones específicas de las relaciones raciales dentro de esos contextos espaciales y temporales.”