sábado, 23-11-2024
"Las políticas comerciales promueven la idea de que la medida del éxito está dada por el nivel de excelencia en el trabajo artístico, con igualdad de oportunidades para todos aquellos que alcancen altos resultados cualitativos, sea cual fuere el tipo de música que cultiven. Esto pudiera parecer coincidente con una de las características fundamentales de la política cubana en lo que respecta a la cultura artística: el estímulo a la creación genuina como fundamento de los valores socialistas revolucionarios. Pero este principio ha entrado en contradicción con el creciente avance de los mecanismos comerciales y estandarizadores, lo cual no solo constituye un peligro para la música, sino para la cultura, que se nutre de su esencia creadora..."
Entrevista a Leo Brower: “Cuando era joven la inspiración le producía escalofríos. Hoy sigue pareciendo joven, solo que la inspiración le resulta una buena manera de buscar motivaciones para crear. Viene de vuelta del pavor que produce la fama y con el trabajo que cuesta haber roto la tradición. Prefiere el anonimato para seducir por el hombre que es. Es un hombre especial, Leo Brouwer, quien hace años se inventó una manera sensual de tocar la guitarra. Íntimamente cercano a ella, encontró entonces la manera de hacer su música estrictamente universal. Universal se ha vuelto, aunque su esencia es la cubanía, la que está en el ritmo de su música, en la posibilidad de descubrir entre muchas a la cubana o en la manera de paladear el café…”
La cultura se ha convertido en una industria que reproduce la construcción simbólica de la sociedad en producciones comerciales. Cuando estas se destinan al ocio, comienzan a formar parte de una industria del entretenimiento, a la cual pertenecen los videojuegos. La audiencia es tan grande que estos han logrado atraer y las ventajas que ofrecen como soportes publicitarios son factores que han llamado la atención de diversas marcas con intenciones de emplear técnicas y formatos para influir en el modo de vivir y pensar de los consumidores. También es menester indagar en el desarrollo de los videojuegos en el contexto cubano y la intención con la que se producen.
¿La participación ciudadana conduce a una gran red social? Este estudio afirma que los altos niveles de participación ciudadana pueden obstruir la integración social individual. Utilizando datos de la Encuesta alemana sobre voluntariado (Deutscher Freiwilligensurvey; 1999-2009), este estudio realiza regresiones macro y a multinivel para examinar el vínculo entre la participación ciudadana y la integración.
“Es difícil ubicar a Cuba en la geografía del empleo (¿o del desempleo?), que hoy parece idónea para clasificar el mundo contemporáneo. La bibliografía más actualizada es pródiga en calificativos para describir las realidades laborales más extendidas. Asumiéndolos, podemos decir que la realidad cubana no es una sociedad de desempleo masivo, como se califica hoy la de los países centrales, sobre todo europeos; no es en rigor una sociedad con empleo polarizado como los Estados Unidos; de desempleo estructural como América Latina, ni de desempleo catastrófico, como se nos ocurre denominar la situación de los países de Europa del Este, según los criterios de algunos especialistas…”
“Al hablar del desarrollo rural, lo estamos concibiendo no desde una posición de crecimiento económico, de antropocentrismo exagerado, de paquetes tecnológicos productivistas, sino en una visión integral y totalizadora que armonice y garantice todas las facetas de los seres vivos incluido el hombre. Lo ambiental es así la base de un verdadero desarrollo rural…”
“Suponer que el concepto «desarrollo sustentable» se agota en una definición única y precisa, sería un error. En realidad, con este término se designa un amplio espectro de posiciones, algunas contrapuestas. La más citada definición, aparecida en el informe Nuestro futuro común, expresa que «desarrollo sustentable es aquel que satisface las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para satisfacer sus propias necesidades»…”
“En un país isleño, pobre, pequeño y aislado, donde la mayoría de la población es urbana, parece lógico extender los principios de la sustentabilidad –inicialmente restringidos a garantizar el equilibrio en el medio natural– a la interacción del medio construido con el natural y el social, con la economía que lo sustenta o depreda, y con la política que lo canaliza o frena. La integralidad y el equilibrio deberán salir de la coexistencia mutuamente ventajosa entre el medio natural, el construido y el social, animados por una identidad nacional basada en una cultura de la convivencia, y una economía que funcione más allá de los intereses sectoriales perentorios. En la medida en que ello sea posible, Cuba podría aportar al mundo un nuevo modelo de socialismo sustentable…”
Este artículo, que utiliza la vía de la investigación musicológica y textual, es un ensayo interpretativo sobre la historia de la música cubana en los Estados Unidos. El autor bosqueja la relación de esta historia con la música norteamericana; examina cómo utiliza la comunidad latina en el más amplio sentido del término los estilos de origen cubano; indaga el impacto de la fuerza del mercado sobre los músicos; y argumenta la ubicación de esta música en el espectro de la cultura musical popular norteamericana.
“Nosotros, Superiores Provinciales de la Compañía de Jesús en América Latina y el Caribe, siguiendo el llamado de la Congregación General 34 a profundizar nuestra misión fe-justicia, queremos compartir con todos los que participan de la misión apostólica de la Compañía de Jesús en el continente y todas aquellas personas preocupadas y comprometidas con la suerte de nuestro pueblo, especialmente los más pobres, algunas reflexiones sobre el llamado neo liberalismo en nuestros países. Nos resistimos a aceptar tranquilamente que las medidas económicas aplicadas en los últimos años en todos los países latinoamericanos y el Caribe, sean la única manera posible de orientar la economía y que el empobrecimiento de millones de latinoamericanos sea un costo irremediable de un futuro crecimiento…”
“La primera virtud que debe tener la música para el cine es no estorbar el filme”. La frase, del maestro Leo Brouwer, resume admirablemente toda una teoría acerca del trabajo específico del músico en función del séptimo arte; ciertamente, la partitura que acompaña a la película, como el resto de los subsistemas que la integran, no puede constituir un escollo para el mismo, tampoco un subordinado gris: ha de ser, por el contrario, un recurso creador, a la altura de los más importantes códigos y signos visuales y el resto de los sonoros, a los que el espectador se enfrenta para recibir el mensaje y los ideologemas lanzados por el realizador…
Este artículo profundiza en la intrincada relación entre el cambio climático y la pobreza energética en África, examinando los polifacéticos retos a los que se enfrenta el continente y destacando las posibles vías para un cambio transformador. Se exploran las repercusiones del cambio climático en sectores vitales como la agricultura y la salud humana, junto con un análisis del alcance de la pobreza energética y sus consecuencias socioeconómicas. El artículo hace hincapié en las oportunidades de soluciones sostenibles, incluidas las fuentes de energía renovables, las medidas de eficiencia energética, los sistemas descentralizados, los mecanismos de financiación innovadores y la integración de las políticas climáticas y energéticas. La conclusión subraya la urgente necesidad de hacer frente tanto al cambio climático como a la pobreza energética, y reclama una mayor cooperación internacional, inversiones nacionales sostenidas y apoyo político para fomentar una África más verde y resiliente.
El impacto social, económico y político que ha desencadenado la actual situación epidemiológica combina los efectos de una crisis sanitaria sin precedentes, con los síntomas de una crisis educativa de largo alcance. Aquí se presentan argumentos que permiten afirmar su preexistencia y condicionamiento de la actual situación. La proximidad del cumplimiento de los plazos pautados por la Agenda 2030 para el logro de una educación, inclusiva y de calidad para todos y todas, impone un análisis detallado de la situación actual. Se ofrece un acercamiento a esta panorámica tomando como referentes las premisas inclusivas de acceso, permanencia, participación y aprendizaje; rutas metodológicas que permitan desde la dimensión institucional, de la clase y el grupo escolar, asumir la situación actual como plataforma y oportunidad de transformación. Se intenta responder no solo a los retos inmediatos, sino a las deudas educativas preexistentes. El análisis se centrará mayormente en la realidad de América Latina.
Conferencia leída en el Paraninfo de la Universidad Nacional de Uruguay, como inicio del curso de Musicología ofrecido por el autor en la Escuela de Música de esa Universidad, en octubre de 1989. Hasta ahora permaneció inédita.
¿Podría asegurarse que las manufacturas no azucareras ni tabacaleras, a las que Julio Le Riverend denominó industrias menores, estaban organizadas como talleres artesanales y no se desarrolló una industria moderna; o inferir que la evolución industrial y empresarial de la Isla fue excepcional dentro del contexto latinoamericano? Este artículo se refiere a la «era de las manufacturas» en industrias menores, pero en el contexto de una Isla que recibía el impacto de la Segunda Revolución Industrial, protagonizada por los países industrializados, y de una economía donde el azúcar lidereó la modernización...”
“«Trabajadores de Antillana de Acero solicitamos intervención». Como forastero, me sorprendió ver, en La Habana, a principios de los años 60, lemas como este colgados en diferentes centros de trabajo. No atiné a comprender en qué consistía esa «intervención» ni por qué los trabajadores la solicitaban, en lugar de otra cosa. Pude saber que la pedían al gobierno revolucionario, en el cual confiaban. Confundí la intervención con la expropiación: se me aclaró que era la administración temporal de una empresa privada, por el gobierno, de acuerdo con una ley que existía antes del triunfo de la Revolución. Cuando, unos meses más tarde, de hecho llegó la expropiación, y me dijeron que en el pasado quienes mandaban en el país eran los ricos y los Estados Unidos, se me hizo todavía más difícil entender la aprobación de una medida tan peculiar como la intervención. Develar ese misterio me costó estudiar la compleja trayectoria del Estado cubano y su relación con las luchas populares del país…”
“Cuba, país obsesionado por la historia, tiene monumentos a sus grandes próceres, como Martí, Maceo y Gómez. ¿Dónde están los monumentos a sus grandes creadores musicales? ¿No dijo el Maestro que donde mejor se revela el alma de un pueblo es en su música? Ella es nuestra religión nacional. Tal vez los instrumentos de la memoria colectiva requieren de otros acercamientos…”
Temas le ha pedido a destacados especialistas de diferentes áreas de la creación, la investigación y la crítica, así como musicólogos y cineastas que reflexionen en voz alta sobre Buena Vista Social Club y el fenómeno artístico y sociológico que representa, para producir un enfoque complejo y multifacético de este asunto. Entre otros aspectos, ellos abordan aquellos que, al menos dentro de Cuba, parecen haber sido los más polémicos: el de la representación visual, por una parte, no solo del entorno, sino de los propios personajes, y el de la exaltación de lo tradicional en detrimento de lo actual…”
“Durante las primeras seis décadas de este siglo, entre la literatura y el periodismo (en particular entre la narrativa y la crónica, la entrevista y el reportaje) fue abriéndose, progresiva y engañosamente, una escisión en apariencia invencible: dos mundos polarizados. Esa dicotomía, supuestamente estructural, técnica y lingüística, iba encaminada también a señalar una diferencia más profunda, pero no por eso legítima: su naturaleza. Además, la diferencia entre la narrativa y dichos géneros periodísticos venía envuelta en el confuso ropaje de los medios de difusión masiva...”
“¿Son los medios los que imponen patrones culturales a las multitudes o son las multitudes las que trazan los derroteros de los mensajes en los medios de difusión? ¿Deben los medios servir de conducto transformador para cambiar las formas caducas de la cultura y el comportamiento social, o deben garantizar su existencia a partir de amplificar esas formas de comportamiento? ¿En lo referente a la cultura, tienen realmente los medios de difusión tanta influencia sobre las multitudes como se piensa? ¿Qué influencia tan determinante ejerce la familia sobre el individuo que, en muchos casos, puede inmunizarlo contra la acción de los medios? ¿Cuántos meses, años o siglos se necesitan para cambiar valores arraigados en las masas populares? ¿Existe una cultura de masas o ese concepto ha sido simplemente una coartada para justificar los procesos manipulativos que ejercen los medios sobre ciertos destinatarios? Las respuestas no son tan simples como pudiera parecer a simple vista.
“El sentido de la publicidad es convencer al consumidor de que el producto o servicio ofertado es el que mejor satisface sus necesidades y expectativas, a fin de que lo compre. Tal convencimiento requiere del publicitario un amplio conocimiento de las normas y valores que rigen en la sociedad en cuyo contexto se ubica el mensaje, del segmento o segmentos poblacionales con poder económico para consumir el producto, y de las bondades de este que sirvan a la autoafirmación del comprador en la realización de actividades exitosas, ajustadas a esas normas y a esos valores…”
El Dr. Eusebio Leal Spengler, historiador de la Ciudad de La Habana, concedió esta entrevista —especialmente para este número de Temas— al periodista Pedro Martínez Pírez, miembro de nuestro Consejo Editorial.
(El presente texto se corresponde sustancialmente con la ponencia presentada por el autor a la Conferencia A cien años del 98; España, Cuba, Puerto Rico y Filipinas, celebrada en la Universidad de Salamanca, en octubre de 1999)
“Aun cuando decidiésemos postergar la polémica sobre el momento más apropiado para fijar el término de nuestro lapso secular, no sería difícil admitir que en Cuba este se adelanta a la convención cronológica: el siglo cubano comienza exactamente en 1898. Mucho de lo ocurrido en la Isla durante el siglo que despedimos parece haber tenido su inicio en aquel año. Tanto las consecuencias directas de la guerra, como los problemas presentes en la posterior trayectoria económica del país, tienen una diáfana expresión en los avatares del azúcar, protagonista ineludible del acontecer económico en la mayor de las Antillas. El comportamiento de la producción azucarera y el papel que esta ha desempeñado a lo largo de cien años de transformaciones estructurales, cambiantes condiciones comerciales, variaciones en la dotación de factores productivos y otras incidencias, constituye el objeto de las páginas que siguen…”
“Al inicio del siglo XX, había una gran cantidad de géneros de música para distintos usos y ambientes, reconocidos internacionalmente, sobre todo los relacionados con la «madre patria», hacia donde habían regresado géneros cristalizados —como la habanera y el punto de La Habana— cuando no los anteriores fandango, petenera, chacona y zarabanda. Aquellos cantes de ida y vuelta, también sufrieron transculturaciones en ambas orillas y definieron características propias. La tradición oral, así como la trasmisión directa por la lectura de partituras, había permitido una verdadera promoción y auge de la música cubana, y fueron los medios masivos —primero el disco y luego la radio— sus iniciales divulgadores en América Latina, los Estados Unidos, España y otros países europeos. Durante todo el siglo XX se produce un amplio y constante proceso de transculturación en la música cubana, con un auge y expansión inusitados del nuevo producto cultural obtenido…”
“En el cine de Wim Wenders, el nudo antropológico no es un acento, un aliento, ni siquiera un tema; es una obsesión, paranoia que argumenta toda la poética. Aun para criticar desde el panfleto a la cultura americana y su pragmatismo, Wenders no puede dejar de usar sus moldes. Su relación de amor-odio con la cultura norteamericana pregona el odio y se reserva el amor para la intimidad. Adora el cine de género; siempre he pensado que sería definitivamente feliz si resolviera irse de una vez a Hollywood para rodar peliculitas funcionales de sábado en la noche. Su mejor película me sigue pareciendo El estado de las cosas, justo porque el autor se sacude el engaño de la inmortalidad y narra una historia sencilla, en una gramática posible, sobre sus eternas dudas en torno a la producción y la dirección de cine. No me explico entonces cómo alguien pueda asombrarse de que Wim Wenders se haya subido tempestuosamente al carro del documental Buena Vista Social Club, proyecto que traía para él un supuesto agravante: hablar de una cultura que no conoce…”
“Los estudios económicos sobre los países de reciente industrialización o NICs son abundantes. Todos subrayan el éxito excepcional de sus economías y la de los países asiáticos que han optado por ese modelo: Malasia, Tailandia, Indonesia y, en menor medida, Filipinas. Los cuatro dragones —Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong y Singapur— representan una parte del comercio mundial igual a la que representa Francia o Japón. En los últimos veinticinco años han más que doblado su participación en el comercio mundial y sus exportaciones han sido multiplicadas por cuatro. De aquí a proponer estos cuatro países como modelos para el resto de países del Sur, hay apenas un paso, y muchos no dudan en darlo. Por eso es de utilidad estudiar más de cerca las condiciones, internas y externas, que permitieron el despegue, las prioridades, el papel del Estado, así como los costos sociales y políticos y su evolución reciente…”
El panel aborda los discursos del son —o la salsa—, el rap, el rock, la trova y la música campesina y debate aquellos aspectos que captan, representan y significan problemas sociales y políticos del país, tanto en el pasado como en la actualidad.
(Mención en el Premio Temas de Ensayo 2001, modalidad de Humanidades)
“Por cuidar la esperanza de los mejores tiempos, supo María Zambrano guardar los saberes antiguos para hacerlos llegar, en las claves de su pensamiento, hasta la reflexión de nuestros días. De ahí la singularidad con que se palpa una muy particular «filosofía de la vida» en su propuesta —seguida y luego escindida— del racio-vitalismo orteguiano. Su nueva «razón poética» es una «razón mediadora» que modula y acerca su discurso a una fuente auténtica de sabiduría…”
Se aborda el envejecimiento y la ancianidad, con énfasis en su arista jurídica, y partiendo de una premisa esencial: la inclusión y autodeterminación de la persona mayor. Desde la panorámica legal cubana, se explican los principios que deben informar la protección de las personas mayores y cómo se manifiesta su proyección normativa. El estudio continúa con el análisis de las medidas de aseguramiento de estos derechos, específicamente los mecanismos de autoprotección; como medidas privadas que emanan del ejercicio de la autonomía de la voluntad de esas personas, ante el escenario del envejecimiento poblacional en Cuba. La reafirmación de la idea de la dignidad como centro de los derechos de las personas y del hecho de que la efectividad de los derechos consagrados implica su eficacia inmediata, y la posibilidad de tutela efectiva ante su vulneración, corrobora la garantía material al ejercicio pleno de los derechos, referido en la Carta Magna cubana.
“El mayor reto para alcanzar un desarrollo sustentable está en cambiar la actual forma de vivir —y por tanto de pensar— de la mayoría de las personas que conforman nuestras sociedades. Por ello, la más importante contribución de los movimientos de agricultura ecológica, urbana y otros, radica en la transformación progresiva de los patrones culturales de productores y consumidores. Esos cambios permitirían lograr una agricultura que contribuya al mejoramiento del ambiente en el que vivirán las futuras generaciones. Es por ello que esta evaluación de logros y desafíos de la agricultura sustentable en Cuba pretende tratar con objetividad las condiciones del país para ese tránsito…”
“El diseño industrial parece constituir una actividad que ha perdido su trascendencia. De una práctica comprometida con la transformación del hombre y del medioambiente, ha pasado a ser en los países desarrollados una profesión técnica, pragmática, que gana su prestigio en el aumento de las ganancias de las empresas. ¿Qué ha sucedido para que un siglo de ensayo (el XIX), y otro de pleno desarrollo (el XX) con suficiente ideario acumulado, hayan desembocado en esta crisis? Y en Cuba, ¿cuál es en la actualidad la situación del diseño? ¿Por qué después de varias décadas de esfuerzo, el diseño no es una realidad integrada a la industria, ni se ha logrado poner en manos de la población productos de calidad?
Este ensayo aporta una visión breve y actualizada de la disponibilidad y uso del correo electrónico e Internet en Cuba, hoy. Ofrece la información más actualizada (hasta mediados del 2001) sobre el acceso a esos recursos, presenta algunos de los argumentos políticos actuales utilizados en el exterior para explicar las limitaciones en la disponibilidad de recursos e intenta explicaciones alternativas que sitúan a la Isla dentro del contexto de los problemas afrontados por los países en vías de desarrollo. También describe el modelo cubano de inclusión digital, que busca integrar al país dentro de la revolución global en las tecnologías de la información y la computación (TIC). No intenta presentar un recuento histórico sobre los orígenes y el desarrollo de los servicios de correo electrónico e Internet en Cuba, debido a que tales estudios ya se han realizado.
Prólogo a la edición rusa de la trilogía De Peña Pobre, de Cintio Vitier. Fue escrito para la edición proyectada en Moscú, en 1991, que quedó inédita. La traducción y versión al español fue revisada por C. V., con algunos datos adicionales entre corchetes o en notas.
El activismo académico antirracista plantea preguntas urgentes sobre el papel de las universidades contemporáneas y los académicos que trabajan en ellas. Mientras profundas crisis sociorraciales chocan con movilizaciones antirracistas masivas, este libro se centra en las prácticas de académicos que trabajan dentro y en contra de sus instituciones en pos de la justicia social antirracista. En medio de una dura crítica del carácter neoliberal e imperial de la universidad, Joseph-Salisbury y Connelly sitúan la universidad como un espacio en disputa, lleno de contradicciones y tensiones. Basándose en datos empíricos originales, el libro considera cómo los activistas académicos antirracistas sortean barreras y reacciones negativas para aprovechar las oportunidades y recursos de la universidad al servicio de las comunidades de resistencia. Al mostrar que las prácticas del activismo académico antirracista son complejas, diversas y multifacéticas, y prestar especial atención a cómo los activistas académicos lidian con sus propias complicidades en los daños perpetrados y perpetuados por las instituciones de educación superior, este libro, y el manifiesto representado en el último capítulo, es un llamado a las armas para los académicos que están, o quieren estar, comprometidos con la justicia social.
Este artículo examina el papel que desempeña el «imaginario» del imperio que Alemania perdió en 1919 en la extrema derecha alemana contemporánea y, especialmente, en su principal expresión, la Alternative für Deutschland (AfD). Se centra en la importancia simbólica de las antiguas colonias en el suroeste de África / Namibia y el este de África / Tanzania y de las conexiones del «imperio informal» alemán con Sudáfrica. Destaca que la AfD se basa en un considerable legado de activismo político en relación con África, que se remonta al nacionalismo colonial revanchista de la era de Weimar, la red global de la «Organización en el Exterior» del Partido Nazi y el populismo de posguerra de Franz Josef Strauss. Los ideólogos de la AfD glorifican los logros del Kaiserreich y subrayan que Alemania no tiene nada de lo que avergonzarse en relación con su historial en la era colonial. El artículo también muestra cómo la AfD se presenta a sí misma como defensora de la minoría alemana en Namibia y de los sudafricanos blancos, cuya posición se representa como una advertencia de lo que ocurre cuando los blancos permiten que los «otros» raciales alcancen el poder político.
Desde una perspectiva crítica con respecto a la teleología del Estado-nación y los presupuestos nacionalistas de los sistemas políticos liberales —con particular interés en los espacios soberanos resultantes de la crisis imperial-monárquica de 1808-1825—, avanzar en el estudio de la (re)configuración colonial posrevolucionaria parece imprescindible si se pretende dar cuenta de la manera en que se diseñó un nuevo orden político decimonónico, sobre todo en lo concerniente las políticas de justicia y orden público, tanto en España como en sus territorios de ultramar. El artículo presenta sucintamente los presupuestos de partida de dicha renovación historiográfica y los cuestionamientos que se aplican hoy al estudio de las instituciones y el imaginario político del primer cuarto del siglo XIX en Iberoamérica, proponiéndolos como instrumentos de análisis pertinentes para dar cuenta de la recomposición institucional, política y cultural que vivió Cuba después de 1808.
“Uno de los temas de debate más vivos en el cristianismo en las últimas décadas es la cuestión de la ordenación de las mujeres. Tradicionalmente, el sacerdocio cristiano ha estado reservado a los hombres, pero algunas iglesias han cambiado la costumbre, se han adaptado a los tiempos y han admitido a las mujeres en el sacerdocio. El movimiento de reforma en este campo comenzó a obtener resultados en la década de los 50 del siglo XX en las iglesias metodistas africanas de población blanca y entre los presbiterianos. El proceso de ordenación de las mujeres ha sido muy discutido y ha dado lugar a grandes fricciones. En 1992, la Iglesia de Inglaterra, tras dos décadas de debate, aceptó la ordenación de las mujeres, que ya ocupaban cargos eclesiásticos menores, como el de diaconisas, lo que les permitía bautizar y oficiar bodas y funerales…”
“El XIX fue el siglo en el que se definen los primeros géneros musicales cubanos, a la vez que los indicios de un nacionalismo musical, que en la segunda mitad del siglo queda totalmente consolidado, representado por los compositores Manuel Saumell, José White, Nicolás Ruiz Espadero, Ignacio Cervantes y Miguel Faílde. La contradanza y el danzón fueron sus elementos germinadores…”. El artículo aborda la creación y las características de los géneros musicales del siglo XIX y la primera mitad del XX: habanera, contradanza, danzón, guaracha, rumba, son, bolero, mambo, chachachá y mozambique.
“Heredada de la ancestral Europa, aún en las dos primeras décadas del siglo XX la música de concierto creada en Cuba mantendría el apego a las normas estéticas procedentes del romanticismo europeo finisecular, aunque algunos compositores ya manifestaran expresiones de acento nativo. Sin embargo, una vez terminada la Primera guerra mundial, se produjo en el pensamiento intelectual cubano una vertiente de afianzamiento de la identidad cultural como coherente reflejo del resurgir de la conciencia nacional. Tradición, modernidad, folklorismo, asimilación foránea, exclusión, integración, entre otros, fueron términos alrededor de los cuales, a modo de puntos de referencia, comenzó a girar desde entonces el problema fundamental de la cultura cubana: la definitiva afirmación de una identidad propia desde el modo de expresión contemporáneo…”
“Una visión sistémica de la cultura debe concebir al ser humano como una entidad que existe también en el espacio social. Este enfoque permitirá analizar las interacciones que se producen entre culturas y seres humanos, tanto en el interior de un espacio como en su relación con sujetos ubicados en otros. Cualquier análisis acerca de la cultura (musical en este caso) que pretenda ser esclarecedor, debe partir también de esa premisa, pues toda cultura musical lleva en sí misma «objetivadas» las dinámicas socioculturales que caracterizan al tipo de comunidad donde el sujeto creador de la cultura desenvuelve su vida…”
A partir de sus viajes entre Italia y Gran Bretaña, y visitas a Cuba, el autor intenta entender la posición de la música cubana vista desde Europa y su relación con los mercados musicales y los diferentes públicos del mundo y su posible inclusión en la categoría world music.
“Definir la timba es una tarea harto difícil, pues no se escribe con notas musicales. Se trata más bien de una combinación de estilos musicales, de tendencias creativas en las que imperan tres fuentes sonoras principales: el jazz, fundamentalmente el latino y el afrocubano; la rumba y, más que todo, lo que algunos musicólogos y rumberos hoy definen como rumba guarapachanguera; y el complejo del son en toda su extensión. Por eso en su ejecución funciona más un libre albedrío organizado que la inspiración aleatoria, como muchos pudieran pensar…”
El autor expone algunas ideas a las que ha ido arribando sobre el quehacer de una zona de la música cubana (que él llama canción cubana contemporánea), insertada en el nuevo pensamiento sociocultural surgido en el país durante el decenio de los 80 con la irrupción de quienes habían nacido en los 60 a los primeros planos de la actualidad nacional.
“Tuve que pensar mucho antes de decidirme a entrevistar al maestro César Portillo de la Luz. La fama de su personalidad polémica, bien ganada, era un desafío. Pero siempre ha sido consecuente con su manera de pensar, sin dejar de ser un hombre comprometido con su tiempo. Con esos antecedentes, corrí el riesgo. En su casa, café en mano, compartimos su preocupación por Cuba, el destino de la música y el amor; su público, al que no ha abandonado durante sesenta años, hablando con su voz, enfrentándose, denunciando y escribiendo…”
“El siglo de las luces «suena», como sin lugar a dudas suenan, aunque de diferente manera, todas las novelas de Alejo Carpentier, unas más que otras, por supuesto”. El autor ha conformado un corpus en el que se incluye todo lo que pudiera servir para tener una idea de la «banda sonora» de la novela, sin los diálogos de sus personajes. El estudio de esta banda sonora le ha permitido, además, proponer algunas hipótesis, que se explican en este artículo.
“A partir de los años 80 del siglo XX, no pasa un año sin que se estrenen diez o veinte cortos y largometrajes, documentales o ficciones, con tema gay. La crítica internacional reconoce que, por primera vez en la historia, existe una sustantiva presencia de gays y lesbianas en las pantallas, pues hasta ahora, y salvo escasas excepciones, el personaje homosexual se veía reducido a lo secundario, y por lo regular se le enmarcaba en tres roles reconocibles: máscara paródica y risible, víctima propicia e inerme, o engendro amoral y morboso propenso a cualquier exceso. De todos modos, ya desde los años 50, se percibía la creciente presencia de lo gay en diversas esferas de la vida social y artística de muchos países...”
“El concepto de exclusión social utilizado en este trabajo designa problemas sociales no solo relacionados con el desempleo o con otros factores evidentes que generan el empobrecimiento, sino principalmente con una nueva forma de exclusión: la relacionada con el ámbito de «sistemas simbólicos», como la religión, que envuelve otras categorías, las cuales, de cierta forma, están ligadas también a factores sociales, pero que no son tan evidentes...”
“En el ámbito profesional, con no poca frecuencia se sigue abordando la sexualidad desde una posición totalmente terapéutica y dirigida a curar (algo muchas veces irrealizable) el síntoma sexual que se presenta. A veces se enfoca el tema solamente desde una perspectiva psicológica, de información, de educación, sin brindar indicaciones precisas de cómo mejorar la ejecución sexual y la capacidad física en general…”
(Mención en el Premio Temas de Ensayo 2004, en la modalidad de Estudios sobre arte y literatura)
“El tema del arte cubano en el extranjero se viene considerando desde hace décadas, con atención particular a la producción literaria. La diáspora de un muy nutrido grupo de músicos cubanos de las más diversas vertientes es un fenómeno que, por su repercusión y complejidad, demanda un serio estudio. El hecho de que varios de los principales exponentes de la generación finisecular de creadores cubanos se hayan marchado del país y radicado en distintos países tiene diferentes explicaciones…”
En 1859, Eusebio Leal era el empleado más joven del Museo de la Ciudad. Allí conoció a Emilio Roig de Leuchsenring, el Historiador de La Habana. En 1967, debió asumir la responsabilidad de continuar el sueño de su maestro: reconstruir y conservar todos los bienes de la zona antigua de La Habana, en la Plaza de la Catedral, y convertir el edificio que hoy ocupa la Oficina del Historiador en un museo. En esta entrevista, Leal conversa, entre otras cosas, sobre la ciudad, la enseñanza de la historia y la restauración.
Los debates contemporáneos sobre las temporalidades múltiples que marcan la vida de las sociedades y los individuos sugieren una perspectiva novedosa para entender la vida en los centrales azucareros cubanos en la actualidad. El texto, basado en quince años de investigaciones, propone la existencia de una tipología de centrales resultante de los cambios posteriores a la reestructuración de 2002, y reflexiona sobre las perspectivas de desarrollo sociocultural basadas en la agroindustria.
Se ofrece un avance de una investigación más amplia acerca de la ganadería en Cuba y sus implicaciones socioambientales entre finales de la Segunda guerra mundial y el Período especial. Y se centra la atención en las estadísticas existentes acerca de la producción de leche al triunfo de la Revolución de 1959 y sus distorsiones por motivaciones políticas, en un contexto caracterizado por los debates, las políticas y las acciones para ampliar el consumo de proteína animal como símbolo del salto hacia el desarrollo económico.
El tratamiento de la impronta krausista en la cultura cubana ha tenido por lo general el objetivo de demostrar su inexistencia o la precariedad de sus manifestaciones, tipificándose por una posición subjetiva adversa al reconocimiento del influjo krausista en figuras paradigmáticas de nuestra historia política y cultural. Proliferaran en la historiografía del tema tópicos y estereotipos deformantes como el que percibe a Krause como un mediocre epígono de la Filosofía Clásica Alemana, místico y nebuloso. Desde las perspectivas que configuraba la referida valoración de Krause, se estima inadmisible que sus ideas hubieran podido dejar su impronta sobre el pensamiento de un Luz y Caballero, o un Martí; en el examen de la presencia del krausismo en el pensamiento de este último es que se centra el artículo.
Al tiempo que reconoce el papel de las políticas públicas, este artículo defiende que el crecimiento de la industria del ecoturismo se muestra mejor como un ejemplo de creación conjunta, en que participan pequeñas empresas emergentes a manos de emprendedores que operan las reservas privadas, los recorridos, el alojamiento, así como las organizaciones no gubernamentales (ONG) científicas o medioambientales.
Este artículo resume un estudio sobre las relaciones y actitudes hacia el deporte en los casos de mujeres con distintos orígenes culturales y lingüísticos en Australia. ¿Por qué las mujeres de otros orígenes culturales y lingüísticos muestran bajos niveles de participación en los deportes? ¿Cuáles son sus percepciones sobre estos? ¿Cómo pueden los encargados del deporte ampliar las oportunidades de participación de las mujeres en estos casos? Estas fueron las preguntas claves de este estudio indagatorio de las experiencias y opiniones, tanto de las mujeres de estas procedencias como de los responsables de las actividades deportivas.
¿Cómo podemos aprender la historia a través de la música? ¿Cómo la música sirve de archivo de nuestra historia? ¿Qué historias narran las músicas caribeñas, y desde qué punto de vista? Nunca había pensado en la música como recurso de aprendizaje en sí mismo. Las reflexiones que siguen buscan una respuesta para estas preguntas, al presentar cómo la música nos sirve de texto social e histórico. Pretendo ilustrar su potencial como un recurso fundamental para entender las dinámicas sociales, políticas e históricas en el Caribe.
(Reseña de Agustín Acosta, La zafra. Poema de combate, Sociedad Económica de Amigos del País, La Habana, 2004) “La republicación de La zafra era una necesidad, y también un acto de justicia cultural, ochenta y un años después de su primera edición en 1926. Este libro, que fue muy famoso en su época, no se había vuelto a publicar en Cuba desde entonces; incluso se cometió la tremenda injusticia de que, en 1980, cuando se realizó la antología Poesía social cubana, no se incluyó ningún poema de La zafra. Hay que felicitar a la Sociedad Económica de Amigos del País, que permite saldar esa injusticia, y poner en circulación este poemario, para que miles de personas puedan apreciar un libro esencial para su época, y para ahora también…”
Investigadores y editoriales cubanas han asumido el reto de atrapar, en su más clara dimensión, la multiplicidad de facetas que ofrece la música cubana desde el rico mosaico integrado por ritmos, géneros, figuras y procesos en el devenir cultural de la nación. Letras Cubanas, a no dudar, es una de las editoriales que ha contribuido más a la conformación de una bibliografía básica sobre esta manifestación, como se demuestra en la publicación reciente de los volúmenes Una leyenda de la música cubana; El son no se fue de Cuba. Claves para una historia (1959-1973); El casino y la salsa en Cuba; y Pensamiento musicológico, que este texto reseña.
¿Cómo afectó al cine cubano el Periodo especial? ¿Se puede hablar de crisis y recuperación? ¿Cuáles vías económicas y tecnológicas tomó la industria para seguir haciendo cine en Cuba? ¿Qué pasó con la documentalística? ¿Se puede identificar el cine cubano con el ICAIC? ¿Qué función le corresponde en la actual diversidad de productores? ¿Qué ventajas y desventajas tiene el audiovisual? ¿En qué medida las coproducciones benefician o perjudican a la cinematografía nacional? ¿Es aconsejable mantenerlas? ¿Hay un marketing efectivo para el cine cubano? ¿Se aprecia una nueva estética en las películas de los jóvenes realizadores? ¿Cómo responde el público a ellas? Especialistas en el tema, desde la creación, la docencia y la institucionalidad debaten estos y otros aspectos de la producción y distribución del cine cubano.
Entrevista al Cardenal Jaime Lucas Ortega Alamino, quien fuera ordenado obispo en 1978, y en 1982 asumiera el Arzobispado de La Habana. Ortega conversa con Aurelio Alonso sobre los problemas más importantes que abordó la XXXI Asamblea del CELAM y su posición ante al rumbo de procesos políticos en Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua; la agresividad de Washington hacia Cuba en los últimos cinco años; y los derechos reproductivos de las mujeres y la libertad de orientación sexual de ambos géneros, entre otros temas.
¿Qué escribió Lennon y qué McCartney? ¿Hasta dónde llegaron sus respectivas responsabilidades creativas? ¿Cómo trabajaban? Si trabajaron separados en algunas canciones, ¿quién fue más exitoso? ¿Qué hicieron los restantes Beatles en materia creativa? ¿Cómo se incorporaron, si lo hicieron, al trabajo de los dos primeros? ¿Era Lennon el director de los Beatles? ¿Lo fue alguna vez? ¿O era su líder informal? ¿Era John más roquero y Paul más baladista? ¿Era Lennon el «hombre de la vanguardia» y los demás los más conservadores en materia artística? ¿Era Paul el músico y John el poeta? Intentaré responder esas preguntas.
El objetivo de esta sesión es tratar de profundizar en algunos problemas que afectan en general a los medios de difusión, y en particular a la radio como un instrumento de comunicación y retroalimentación con los radioyentes ¿En qué medida la radio ha ofrecido históricamente un espacio para la expresión de la opinión pública y el desarrollo de una conciencia ciudadana en Cuba, una conciencia cívica? ¿Cómo se compara con otros medios de difusión, en particular con la prensa escrita y con la televisión?
Semblanza de Usmán Sembén, paradigma de intelectual africano comprometido con su pueblo. Pescador, albañil, mecánico, estibador, conoció en carne propia, desde muy temprano, la explotación de la clase más humilde en el más expoliado de los continentes. Con el correr de los años se convertiría en una figura cimera de la intelectualidad africana.
En la sala Rubén Martínez Villena de la UNEAC, el viceministro de Cultura, Fernando Rojas presentó el libro electrónico Estudios sobre el estalinismo, del autor Iván Felixovich León. Según Rojas «una contribución muy importante sobre todo por compilar textos de autores contemporáneos [uno húngaro y el resto rusos], y porque esclarece y profundiza en el bolchevismo».
“Diversos autores asumen que el término sistema socioecológico resulta apropiado para sectorializar y caracterizar hoy la biosfera de nuestro planeta. Dicha acepción, además de darle continuidad conceptual al denominado geosistema en muchas teorizaciones sobre la interrelación hombre-naturaleza, le otorga valor metodológico por permitir explorar el nivel de autoconciencia de la naturaleza a través del análisis del proceso de gobernanza, así como del grado de sustentabilidad logrado en los espacios operativos humanos…”
El artículo asume el compromiso por la justicia climática desde una sociología de las desigualdades y la política social, a partir de una máxima extraída de las reflexiones de Edward Said sobre el papel público de los intelectuales: la necesidad de discernir sobre las opciones para la intervención activa, considerando que siempre es posible identificar dialécticamente un problema que no es exclusivo de un grupo, sino comprender que otros grupos tienen algo similar en juego y pueden trabajar en un proyecto común.
Panel de Último Jueves realizado en el Centro Cultural Cinematográfico ICAIC, en abril de 2012. Una discusión, desde la experiencia de tres investigadoras que se dedican a estudiar el tema demográfico que responden a cuestiones como: envejecimiento, fecundidad, migración, repercusión social de esos fenómenos, y estrategias para hacer frente a tal problemática, con vistas al futuro.
Un siglo de jazz en Cuba es un libro fundamental, un esfuerzo intelectual inédito, obra del infatigable Leonardo Acosta, que recoge y evalúa hechos, personas, y fenómenos claves de la historia del jazz en territorio cubano. En esta reseña se repasa sucintamente un texto que es, sin dudas, una lectura obligada para estudiosos del tema y amantes del género.
El documento explica los viejos y nuevos temas que el movimiento indígena en América Latina enfrenta en el contexto tanto de gobiernos con políticas neoliberales o progresistas. El eje del análisis de las actuales formas de colonialismo presente en estos dos tipos de gobiernos que refuncionalizan y reinventan modos de explotación, extracción, despojo de territorios, destrucción de recursos e incluso bienes colectivos de poblaciones indígenas u originarias con el objetivo principal de acumular capitales. Ante la situación actual, el movimiento indígena en América Latina, como sujeto político heterogéneo produce nuevas plataformas y estrategias comunes de lucha para minar cada ciclo de opresión en la necesidad de desarrollar la sociedad bajo la condición de minimizar el cambio de la estructura social.
Según la tesis más común en los Estados Unidos, la derecha cubanoamericana ha definido la política estadounidense hacia Cuba a través de su cabildeo y poder político en las elecciones de la Florida. Este ensayo rechaza esa tesis, argumentando que «la política hacia Cuba ha sido de Estado con el objetivo de cambio de régimen y una estrategia de embargo/bloqueo desde 1959». El papel de la derecha cubanoamericana ha sido de instrumento útil, no de factor determinante para ella. En cada ocasión, cuando los gobiernos estadounidenses han intentado modificarla de manera importante, esta derecha no ha podido detener esos cambios. En efecto, solo ha tenido éxitos porque empujaban una puerta abierta por la política de Estado.
El texto propone distinguir ese constructo que conocemos por cine cubano, de otro igual de inefable que pudiéramos llamar el cuerpo audiovisual de la nación cubana. Mientras que con el primero generalmente se alude a un conjunto de películas y sujetos que pueden localizarse con cierta facilidad en el espacio y el tiempo, con el segundo estaríamos enfrentándonos a algo que se articula más allá de lo que una metafísica de la presencia (lo que está a la mano) permitiría describir con precisión.
¿Qué es lo sostenible? ¿Qué dimensión tiene? ¿Cuáles son sus diferentes aristas? ¿Se puede hablar de desequilibrios que afectan los procesos social, económico y cultural? ¿Qué quiere decir sostenible cuando se habla de socialismo? ¿Se puede hablar de comunidades no sostenibles? ¿Existen acciones para preservar y a hacer sostenible la vida comunitaria, más allá de las orientaciones y del lenguaje que se utiliza para codificarlo? ¿Cuáles son las principales amenazas para desarrollar plenamente la sostenibilidad? ¿Cómo acoplar los saberes tradicionales y las necesidades locales específicas con los problemas del desarrollo a nivel nacional y las políticas que lo promueven? ¿Cuáles son los principales obstáculos? ¿Cómo se forman ciudadanos que contribuyan a la sostenibilidad? Un economista, un agrónomo emprendedor, un filólogo, un especialista en cuestiones medioambientales y un promotor cultural ofrecen sus impresiones acerca de estas cuestiones y sus implicaciones, ante un auditorio inquisitivo.
La regulación constitucional vigente traza nuevos derroteros para la municipalidad cubana donde se identifica aún la necesidad de una comprensión teórica que incida en la transformación de la práctica sociopolítica. La declaración formal de autonomía municipal por la Ley debe acompañarse de un actuar efectivo por los órganos y actores implicados; y, en consecuencia, la práctica sociopolítica debe nutrirse de las herramientas y pautas que en el orden teórico le permitan realizar su fin constitutivo. Es por ello que, sobre la base de la revisión de las instituciones gobierno, autonomía y descentralización, se presenta una contribución teórica sobre el municipio cubano actual que busca apoyar su adecuada y democrática gestión.
Luego de la aprobación de la nueva Constitución, los municipios cubanos están en proceso de cambio, teniendo en cuenta que esta les otorga autonomía y la posibilidad de gestionar, de manera integral, sus recursos. Tomando como base las limitaciones que entorpecen la gestión municipal, el objetivo del estudio que en estos momentos se ejecuta como parte de una investigación de doctorado, es desarrollar un sistema para la gestión del conocimiento y la innovación en los gobiernos territoriales con enfoque en la economía energética para el desarrollo local sostenible (SGCIEn).
Este artículo tiene como objetivo construir una red de intercambio de conocimientos entre el gobierno y los sectores productivo, comunitario y universitario para el desarrollo local sostenible. Para lograrlo, los autores se apoyaron en los conceptos de desarrollo local sostenible, capital social, la relación entre sectores o intersectorialidad, redes y conocimientos interdisciplinarios y transdisciplinarios. En cuanto a la metodología, se utilizó el método abductivo. Bajo un diseño documental, las técnicas de investigación fueron un análisis de contenido de documentos teóricos y la técnica de inferencia deductiva. Como resultado, se destaca la construcción de una red de intercambio de conocimiento para el desarrollo local sostenible. Se concluye que las redes de conocimiento para el desarrollo local sostenible tienen implicaciones positivas en el establecimiento de alianzas y vínculos entre los sectores que componen la sociedad.
La mayoría de los Estados africanos poscoloniales contemporáneos apoyan el cercamiento de millones de hectáreas de tierras consuetudinarias habitadas por pequeños agricultores en favor de grandes inversiones mineras y agrícolas extranjeras como única vía hacia un desarrollo rural "moderno". En el contexto del actual "acaparamiento de tierras" en el Sur global, los resurgentes procesos globales por los que los recursos naturales son cercados para beneficiar a las grandes inversiones basadas en la tierra se caracterizan a menudo como "acumulación por desposesión". Sin embargo, ese término es un enfoque excesivamente amplio y materialista al tratar de abarcar un abanico muy amplio de procesos globales de desposesión. Por lo tanto, este artículo destila los tres rasgos centrales de la acumulación por desposesión -coerción, consentimiento no voluntario y corrupción- para explicar la actual desposesión material e incorpórea de los pequeños agricultores en el África meridional poscolonial. Este enfoque magnifica cómo una poderosa triple alianza de líderes tradicionales, el Estado y el capital privado están despojando a los agricultores locales que viven en tierras consuetudinarias a pesar de toda una serie de normativas mundiales y nacionales que deberían otorgar a las comunidades el derecho a la autodeterminación. Al centrarse en las perspectivas de los pequeños agricultores de nueve lugares de estudio en Sudáfrica, Mozambique, Zimbabue y Zambia, se cuestionan los intentos de venerar excesivamente las inversiones a gran escala basadas en la tierra como la solución mágica para transformar las zonas rurales.
Se reflexiona acerca del cambio de la estructura por edad de la población cubana y sus implicaciones en el desarrollo sostenible, utilizando como referentes determinadas dimensiones o esferas de la sociedad que resultan claves en esta situación. Se pretende sensibilizar a los decisores y diseñadores de políticas, investigadores y estudiosos sobre el tema en la importancia de utilizar adecuadamente la información estadística desagregada disponible sobre este grupo poblacional que en la actualidad representa 20,8% y se espera que alrededor de 2050 sea más de 33%.
¿En qué consiste el consenso? ¿Cuál es su naturaleza específica? ¿Cómo se relaciona con el disentimiento? ¿En qué medida se ha transformado en Cuba? ¿Hasta qué punto se articula un consenso en torno a los patrones y el contenido del consumo? ¿Cómo se relaciona la anatomía del consenso con la información y la transparencia? ¿En qué medida las diferencias en el consenso se hacen sentir también dentro de las instituciones? ¿Cómo la recepción de los programas de televisión son indicadores de consenso? ¿Cuáles son los principales espacios de reproducción del consenso: las redes, los espacios culturales, el Partido y la UJC, las asambleas del Poder Popular, los medios de comunicación? Un profesor de comunicación, una especialista en protección del consumidor y un investigador sobre la recepción de los contenidos de la televisión y la radio discuten con un atento auditorio en torno a estos y otros problemas.
A partir del reconocimiento de las intensas luchas que protagonizan los pueblos indígenas de Latinoamérica en años recientes, analizo la relación entre los aportes teóricos elaborados, bajo las concepciones del marxismo, por José Carlos Mariátegui y Álvaro García Linera. Se traza como objetivo rescatar de esos autores sus posibles vínculos con los procesos actuales de lucha y resistencia en estas comunidades. A la vez, examino la articulación entre etnificación y la perspectiva analítica de la lucha de clases como formulación válida para identificar el potencial transformador de las luchas indígenas actuales.
En las últimas dos décadas, participantes e investigadores del tema de las sanciones han construido una narrativa alrededor de las sanciones económicas y que, en gran medida, contradice la realidad. La noción de “sanciones inteligentes” sugiere que se trata de medidas construidas con gran esmero para asegurar que las poblaciones vulnerables no sean objeto del extenso y catastrófico alcance de los daños según se han manifestado en el caso de Iraq. En esta narrativa, todo daño sobre cualquier población vulnerable es mínimo y ciertamente inintencionado. Sin embargo, la realidad es bastante diferente. La práctica común para los Estados Unidos, en alguna medida para otras naciones, e incluso para el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, es elaborar medidas económicas dirigidas a los sistemas que son fundamentales para el funcionamiento de cualquier sociedad o economía moderna: el acceso a las transacciones bancarias internacionales, las importaciones, el sector energético, la producción industrial y la infraestructura del país. A pesar de la retórica, esa es la realidad.
Se aborda el tratamiento del teatro cubano, a partir de varios textos, sobre los Sucesos de la Embajada del Perú y el Éxodo por El Mariel. El análisis del texto teatral El grito, escrito en 1987 por Raúl Alfonso, revela la capacidad cuestionadora del teatro y su posibilidad de abordar este complejo tema desde sus vínculos con lo real, la historia y la memoria como enlace entre lo afectivo y lo político.
La gestión de las artes en Cuba no está ajena a las transformaciones socioeconómicas que vive su sociedad. En especial en la capital surgen continuamente nuevos modelos de gestión de la cultura. Muchos de ellos están signados por fórmulas de trabajo que aplican la autogestión, la horizontalidad y que son en ocasiones más dinámicas y eficaces que el sistema institucional del Estado, con el que sería conveniente y deseable que interactuaran, de manera legal y organizada.
Se examinan materiales dados a conocer en diciembre de 2012, que no solo responden a muchas de las interrogantes sobre la sociedad soviética y su colapso, sino también han producido nuevas interrogantes relacionadas con las formas de funcionamiento de las instituciones y las organizaciones políticas en la era del imperialismo globalizado.
Se muestra los resultados de la aplicación de una encuesta en Cuba, como parte de un proyecto cuyo propósito esencial fue construir la fisonomía de la región latinoamericana y caribeña en materia de convivencia interna y gobernabilidad, mediante la consulta a expertos, diversos en temáticas. Contiene además consideraciones sobre las particularidades del contexto sociopolítico cubano.
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