sábado, 12-10-2024
La profunda y prolongada experiencia de desarrollo capitalista neoliberal chilena produce un cambio drástico en la estructura social, así como en las modalidades de explotación, lo que conduce a nuevos patrones de conflicto que se expresan en forma gravitante en la revuelta popular reciente. Este panorama se acompaña de profundos cambios en la cultura política, lo cual, junto a lo anterior, plantea desafíos de actualización a los idearios de emancipación de la izquierda.
Este artículo discute las bases sociales del «bolsonarismo», el rol de los militares y de los evangélicos, los diferentes grupos de derecha y extrema derecha en el Brasil y la actuación de las izquierdas del país en años recientes.
Según la tesis más común en los Estados Unidos, la derecha cubanoamericana ha definido la política estadounidense hacia Cuba a través de su cabildeo y poder político en las elecciones de la Florida. Este ensayo rechaza esa tesis, argumentando que «la política hacia Cuba ha sido de Estado con el objetivo de cambio de régimen y una estrategia de embargo/bloqueo desde 1959». El papel de la derecha cubanoamericana ha sido de instrumento útil, no de factor determinante para ella. En cada ocasión, cuando los gobiernos estadounidenses han intentado modificarla de manera importante, esta derecha no ha podido detener esos cambios. En efecto, solo ha tenido éxitos porque empujaban una puerta abierta por la política de Estado.
En el presente, hablar de izquierdas y derechas en Cuba apunta a una cuestión de creciente relevancia: la representación política. Quizás su mejor expresión sea la disociación entre poder y proyecto revolucionario. Se trata de un disenso que ha ganado fuerza tras la crisis y reajuste de los años 90, y que ha hallado suelo fértil en una sociedad cada vez más desigual y diferenciada. Ante el desgaste de las estructuras y mecanismos de participación, la desintegración del sistema soviético agudizó la crisis del modelo socialista y propició diversas perspectivas sobre el proyecto social. Un espacio público menos sujeto al control estatal sobre la reproducción de ideas coexiste hoy con una comunidad y un entorno digital y social transnacionalizados.
El derecho de acceso a los archivos ha transitado, a lo largo de la historia, por diferentes etapas marcadas por la legislación inherente a estos procederes. El presente ensayo pretende analizar, desde una visión histórico-jurídica, el Decreto-Ley 265/2009, del Sistema Nacional de Archivos de la República de Cuba, y cómo se gestionó, desde tal disposición, el derecho de acceso a los documentos, teniendo en cuenta su evolución histórica. La finalidad de los análisis recae en aprender de sus debilidades y fortalezas para continuar construyendo una norma que facilite y gestione el derecho al acceso a los archivos y documentos generados en el país.
Este somero recorrido por algunas temáticas y autores propone una reflexión sobre la crítica y el ensayo literarios de la diáspora cubana e intenta definir, además, asuntos de interés para la discusión teórica acerca de cómo abordar esa literatura extrafronteriza y su relación con el canon cubano.
En este trabajo planteamos algunas hipótesis en torno a posibles relaciones entre las obras de Camilo Torres Restrepo y Karl Marx. Partimos de una crítica a la confusión entre paradoja y contradicción que, viniendo del marxismo ortodoxo y del cristianismo recalcitrante, termina negando cualquier vínculo posible entre ambas.
"El siglo XX se abrió paso en el Caribe con un signo: el de la autorreflexividad y la autodefinición, en una evidente voluntad desalienadora que ha significado asumir el sentido de lo propio en su condición de diferente a lo metropolitano, en un proceso más o menos profundo de autopenetración para, en la larga historia de encuentros y desencuentros, avanzar hacia el reencuentro con la personalidad cultural caribeña. La secuencia de acontecimientos históricos en el Caribe fue generadora de un proceso de mestizaje cultural, no solo en el plano etno-racial sino también temporal-social. Las diversas culturas que se mezclarían en el crisol de la región, vivían en tiempos históricamente diferenciados y las condiciones coloniales las colocaron en relaciones de polarización social, tendientes a la desvirtuación de sus propias características históricas originales..."
"La jerarquía de lo estético sobre lo artístico en el espacio Caribe obedece a otras muchas razones, entre ellas la inexorable contextualidad ritual de la experiencia cultural o la cierta iconoclastia heredada con el legado africano. Pero el principio común y desacralizado de lo artístico en pos de una experiencia estética que puede contenerlo, pero que en cualquier caso lo trasciende, nos conduce a reparar en las analogías entre el comportamiento del diseño sociocultural caribeño y las especificidades del cine, respaldadas además por el hecho de que en el cine, si bien no se puede renunciar a la objetivación o a los condicionamientos materiales del soporte, a menudo el acto de recepción valoriza mucho más la referenciabilidad del argumento, el «embrujo» de la historia, las coordenadas del relato que los principios de su articulación en la pantalla, lo cual viene dado también por la celeridad con que se suceden las acciones a los efectos de la percepción de un receptor medio..."
"Las políticas comerciales promueven la idea de que la medida del éxito está dada por el nivel de excelencia en el trabajo artístico, con igualdad de oportunidades para todos aquellos que alcancen altos resultados cualitativos, sea cual fuere el tipo de música que cultiven. Esto pudiera parecer coincidente con una de las características fundamentales de la política cubana en lo que respecta a la cultura artística: el estímulo a la creación genuina como fundamento de los valores socialistas revolucionarios. Pero este principio ha entrado en contradicción con el creciente avance de los mecanismos comerciales y estandarizadores, lo cual no solo constituye un peligro para la música, sino para la cultura, que se nutre de su esencia creadora..."
“En este artículo aparece enunciado un conjunto de contradicciones que caracterizan la problemática racial cubana en la actualidad. Inicialmente, pretendo ubicar esta propuesta reflexiva en un marco teórico en el cual se relacionan tres procesos sociales que han estado estrechamente interconectados en el proceso histórico cubano: la estructura social, la identidad y la integración social. A través de este enfoque se intenta valorar la incidencia de la problemática racial en las relaciones sociales más generales que se estructuran en la sociedad cubana…”
El presente trabajo se coloca en la perspectiva de la sociología política, específicamente dentro de la problemática de los sistemas y regímenes políticos de la región. No se trata, por consiguiente, de una reflexión centrada en ángulos estrictamente económicos, de desarrollo o administración de recursos en el sentido de la noción de governance que promueve el Banco Mundial. No se pretende dar cuenta pormenorizada del estado de la discusión, ni de los diferentes enfoques que la cortan, y mucho menos una tipologización acabada de posturas y enfoques; solo un primer acercamiento a los referentes conceptuales básicos en que se mueve la discusión continental sobre este problema.
“El propósito de este artículo es explicar los vínculos comunicativos, las conexiones y contactos entre fenómenos modélicos que ocurren en los Estados Unidos y que tienen una resultante artística en Cuba, en una coordenada cronotrópica diagramada por la conciencia innovadora de lo moderno en el plano de la artisticidad…”
“La participación ha entrado en el lenguaje político contemporáneo con todas las franquicias que otorga la ambigüedad conceptual. En cierta medida, en el curso de este ensayo seré beneficiario de esta ambigüedad: emplearé el término participación para referirme a situaciones tan distintas como el tipo de involucramiento contenido en los programas comunitarios impulsados por el Banco Mundial y, en el otro extremo, el lugar de la acción política popular en un proyecto anticapitalista. La premisa clave de la participación fomentada por el neoliberalismo, es justamente su ejercicio fuera de todo coto relevante de poder. Cualidad esta última que ha sido repetida más de una vez con entusiasmo por algunos sectores de izquierda que, en aras de renovar de alguna manera los “discursos tradicionales”, son capaces de perder de vista el punto neurálgico de toda la política...”
“Hasta 1987, fecha de la publicación de la Bibliografía Onelio Jorge Cardoso, in memoriam, habían sido publicados treinta y ocho libros del autor, entre ellos selecciones, reediciones, compilaciones. Relatos suyos aparecen en veintitrés antologías de cuentos publicados en Cuba y treinta y tres en el extranjero. Después de esa fecha he podido conocer de veintidós publicaciones de su obra, sin que pueda asegurar que son las únicas. øCómo se ha comportado la crítica ante estas producciones? Si bien la Bibliografía de Tomás Fernández Robaina recoge más de cien estimativas y posteriormente han aparecido otras, la mayoría no responde a un verdadero trabajo crítico; son reseñas o crónicas periodísticas sobre el autor y su obra, debidas bien a la salida de un nuevo libro o algún otro acontecimiento relacionado con el escritor. El resto, sin embargo, ofrece datos de interés para medir la evolución de las apreciaciones sobre la cuentística de Onelio Jorge. El corpus crítico para este análisis lo constituyen alrededor de veinte textos representativos de esa evolución…”
Este texto indaga si la cifra, el número, es también un elemento consustancial de lo real maravilloso en la literatura.
Este artículo analiza las relaciones entre cine y televisión en América Latina. A partir de la selección de distintos momentos y prácticas relevantes para los flujos entre ambos medios, el texto evalúa la importancia del cine y la televisión como mediadores y constructores en las identidades nacionales y continentales en Latinoamérica. De este modo, el artículo examina las tensiones e interacciones entre ambos medios desde una perspectiva geopolítica e histórica, en la que se destaca tanto su competencia por atraer a los públicos locales y como sus conexiones y la recepción de influencias de los medios extranjeros (principalmente europeos y estadounidenses). El texto empieza reclamando la importancia de la televisión para la difusión de las políticas y culturas nacionales, tanto a través de las alianzas de las corporaciones mediáticas y los canales televisivos con el poder político de cada país como a partir de la producción de fenómenos audiovisuales serializados como la telenovela, género televisivo por excelencia del continente. A continuación, el artículo analiza distintos ejemplos de cómo los cineastas latinoamericanos han imaginado la televisión. Por último, el texto sintetiza los aspectos educativos e informativos de la televisión en la región y remarca su importancia para la cultura cinematográfica continental.
Desde una perspectiva histórica, cuyo punto de partida es el nacimiento de YouTube (2005), se establecen algunos hitos del videoclip, así como una revisión taxonómica y actualización de tendencias estéticas surgidas al abrigo de esta era. Un acercamiento que plantea preguntas como la existencia del mencionado posvideoclip y que, por otro lado, trata de entender el cambio formal y narrativo al que está sometido el video musical y que ya recogieron, en primera instancia, autores como Sedeño, Pérez Rufí o Selva.
¿Cómo analizaba la CIA y la «comunidad de inteligencia» del gobierno de los Estados Unidos las posibilidades y las realidades de las insurgencias en América Latina entre los años 40 y 80? ¿Cuál fue la visión de esos analistas sobre las acciones de Cuba y la URSS relacionadas con esas insurgencias? Esta compilación ofrece veintitrés documentos de estimación y pronóstico, que fueron clasificados como «secreto» o «alto secreto», ahora desclasificados, dirigidos originalmente para el uso exclusivo de la Casa Blanca y los altos funcionarios del gobierno. Por lo general, los analistas asesoraron acertadamente sobre la política de Cuba frente a insurgencias latinoamericanas; algunos textos reflejaban muy bien la perspectiva de La Habana. Hubo errores también. El peor fue sistemáticamente subestimar los factores internos que propulsaban acciones revolucionarias en cada país; el énfasis siempre fueron los factores externos, Cuba principalmente. Durante las presidencias de Richard Nixon y la segunda de Ronald Reagan, los analistas contrarrestaron la influencia de los «halcones». Sin embargo, bajo la presidencia de John F. Kennedy, impulsaron la gama de sanciones a Cuba, entre otras, terrorismo de Estado, y bajo la primera presidencia de Reagan estimularon una confrontación en Centroamérica y con Cuba, al exagerar el impacto de las acciones de esta. Aun así, a través del tiempo la labor de los analistas fue profesional, cercana a la evidencia, y dispuestos a corregir errores pasados.
“La imagen de la mujer, que aparece en el arte desde épocas antiguas --específicamente las obras privilegiadas en las historias eurocéntricas del arte-- ha sido, en su casi totalidad, una imagen presente en el arte consagrado, hecho mayoritariamente por hombres, para satisfacer un patrón establecido por hombres…”
¿A qué fenómeno de la actualidad se alude bajo el término de globalización?; ¿cuál sería su carácter?; ¿bajo qué criterios podríamos caracterizarla en los medios académicos y en términos políticos?, ¿cómo ocurre en el centro y en la periferia?, ¿qué relación guarda con las políticas neoliberales?
“Los analistas políticos y los medios de comunicación de los países capitalistas desarrollados comenzaron a dividir desde los años 80 a los militantes comunistas en liberales y ortodoxos. Como todo esquema que pontifica los extremos, este pierde sustancia cuando se aplica mecánicamente a otra realidad, pues deja fuera del análisis a los revolucionarios comprometidos con la realización consecuente de los ideales socialistas, que en Cuba son la fuerza decisiva de la nación. El esquema sirve, sin embargo, para impulsar una política, cuyo objetivo final es fracturar a la Revolución e introducir elementos de confusión en la perspectiva cultural cubana…”
“Hablemos de arte, de esas artes que llamamos plásticas, las que un día tenían la exclusividad de la plasmación de imágenes, de la pintura, la escultura, el grabado. Manifestaciones que, hurgando en el mundo en derredor, fijaban interpretaciones muy disímiles y fragmentarias de acuerdo con los intereses de la época. Exactitud en el detalle y formas dadas en contorno; corporeidad, búsquedas sensuales, texturas y matices generando masa; transparencia de una atmósfera, sentido de infinitud o de proximidad sorprendiendo la complejidad del escorzo y el entrelazamiento de las formas, planos transformadores de la visión del fragmento de vida, fueron conquistas del oficio como respuesta a la cosmovisión imperante en cada momento, convertida en esencias en clave mayor y en recursos para plasmarlas…”
“En el taller de pensamiento cubano que se desarrolló en la Universidad Central de Las Villas (Santa Clara) en noviembre de 1994, se planteó la necesidad de socializar las ideas que allí ganaron consenso. Pienso que este es uno de los grandes problemas a resolver en los presentes momentos en la política cubana con respecto a las ciencias sociales. Para esto se requiere el diálogo entre los científicos sociales, e intelectuales en general, y los políticos que tenemos clara comprensión de la importancia de las ciencias sociales. Sin ese diálogo fracasaríamos en nuestro empeño, porque los políticos desaprovecharíamos el enorme y valioso caudal que suelen aportar las investigaciones bien encaminadas, y las ciencias sociales desembocarían en un ejercicio cientificista distante de las necesidades de la vida…”
En el presente artículo, sin pretender agotar las formas concretas con que se ha presentado el socialismo en diferentes países (lo cual sería imposible, por los aspectos culturales, sociales e históricos que participan en su concreción), se señalan características del diseño que, aunque particularmente agudas en Europa Oriental, han afectado también a nuestro país, si bien no todas están presentes en Cuba, como diferenciadamente se precisa en el curso del trabajo.
“Treinta y tantos años después de constituido, el ICAIC sigue enfrascado con mayor denuedo que nunca en reconocer al tenido por séptimo arte como «instrumento de opinión y formación de la conciencia individual y colectiva», con particular interés en rehabilitar la contribución del cine «a hacer más profundo y diáfano el espíritu revolucionario y a sostener su aliento creador», tal como se enunciaba en aquel Por cuanto de la primera ley cultural que promulgó la Revolución cubana. A partir de entonces, y hasta 1995, las mejores películas nuestras (considerando solo las producidas por el ICAIC) legitiman la responsabilidad artística de interactuar con el entorno social, a partir de la necesidad de extender las fronteras de lo sobreentendido por revolucionario. Las más neurálgicas zonas de la realidad han sido abordadas en imagen y sonido; con el consuetudinario empeño en violentar la estrechez triunfalista, estimular el debate y promover un arte «irreverente» y cuestionador de la realidad….”
La puesta en práctica de normativas que regulen el trabajo de las estructuras municipales, necesitan, más allá de leyes y decretos, de la verdadera posibilidad de actuación de los funcionarios públicos en el ámbito local. El municipio como espacio de poder, presenta dilemas y desafíos que requieren transformar las intenciones en potestades reales. Sus cambios deben relacionarse con enfoques de equidad y con la prioridad que sus gestores le otorguen a las poblaciones involucradas. Priorizar la participación y el control popular en todas las etapas del proceso de desarrollo de las estrategias municipales garantiza su sostenibilidad, asegurando que al interior de los territorios haya una colaboración mutua entre las políticas económicas, sectoriales y de desarrollo.
La interacción recursiva de múltiples factores y eventos a todos los niveles de la sociedad, requieren de cambios culturales y organizacionales, en las prácticas de gestión y cotidianeidad, de las instituciones y la ciudadanía, que se proyecten hacia nuevas formas de alianzas multiactorales, modos de concertación de intereses y participación ciudadana pro-activa y decisoria. Hacia esas metas de largo alcance se presentan elaboraciones y resultados de nuestros proyectos investigativos —y como parte de la Red ESORSE— en municipios de la capital, que aprovechan el acervo de la producción e investigaciones nacionales e internacionales, con el propósito de fomentar valores de solidaridad social y emancipatorios, como fundantes de la proyección socialista de nuestra sociedad.
¿La participación ciudadana conduce a una gran red social? Este estudio afirma que los altos niveles de participación ciudadana pueden obstruir la integración social individual. Utilizando datos de la Encuesta alemana sobre voluntariado (Deutscher Freiwilligensurvey; 1999-2009), este estudio realiza regresiones macro y a multinivel para examinar el vínculo entre la participación ciudadana y la integración.
Luego de la aprobación de la nueva Constitución, los municipios cubanos están en proceso de cambio, teniendo en cuenta que esta les otorga autonomía y la posibilidad de gestionar, de manera integral, sus recursos. Tomando como base las limitaciones que entorpecen la gestión municipal, el objetivo del estudio que en estos momentos se ejecuta como parte de una investigación de doctorado, es desarrollar un sistema para la gestión del conocimiento y la innovación en los gobiernos territoriales con enfoque en la economía energética para el desarrollo local sostenible (SGCIEn).
La provincia de Mayabeque y sus municipios emprendieron el proceso de actualización de sus estrategias de desarrollo, cuyos resultados se exponen en el presente trabajo, como consecuencia de la alianza estratégica entre universidad-gobierno-comunidad a partir de la gestión del conocimiento en función del desarrollo local. De esta forma, se diseñó un sistema de trabajo conjunto ejecutado mediante talleres participativos que permitieron el fortalecimiento de las capacidades de los gestores públicos de la provincia para la gestión estratégica del desarrollo local.
El objetivo de esta contribución es presentar una herramienta de apoyo que permita la implementación de la Estrategia de Desarrollo Municipal desde el esquema de gobierno del municipio Mantua. En el documento se fundamenta la necesidad de una efectiva gestión de gobierno al conectar ciencia e innovación con la solución de los problemas del desarrollo presentes en el municipio y en particular los relacionados con la línea estratégica de soberanía alimentaria que se encuentra en proceso de actualización e implementación. Se muestra cómo la propuesta de Triangulación de actores vinculados al desarrollo local (TADEL) fortalece la relación entre el gobierno local y el grupo de asesores
La aparición de enfoques colaborativos en la política de innovación y la gobernanza regional ha aumentado las expectativas de que las universidades se involucren en la elaboración de estrategias y asuman roles y responsabilidades más amplios. No obstante, las complejidades inherentes al proceso de políticas, el contexto regional y la propia capacidad institucional y organizativa de las universidades a menudo se ignoran o se explican poco al enmarcar las funciones de las universidades. Aunque estos roles se introducen con frecuencia, se han conceptualizado superficialmente en la literatura. Este estudio desarrolla una comprensión teórica y empírica más profunda de las contribuciones de las universidades en las diferentes etapas de los procesos de estrategia de innovación regional. A través de un estudio de caso comparativo de cuatro universidades europeas, explora la variación de estos roles según la etapa política y los actores universitarios involucrados en las estrategias. Los hallazgos sugieren que las universidades se han expandido para desempeñar nuevos roles relacionados con la planificación (por ejemplo, consulta, mediación) y que diversos factores (por ejemplo, el contexto regional, como urbano versus periférico) determinan su participación en las estrategias regionales. Sin embargo, la coordinación estratégica dentro de las universidades y con los organismos regionales es necesaria para optimizar su participación en el proceso de gobernanza regional.
Se propone aportar algunas claves para entender la posverdad —entendida como un fenómeno en el que lo racional y lo objetivo ceden terreno a lo emocional o a las creencias formadas por los ciudadanos, a partir de medias verdades o informaciones falsas— y poder reconocerla en las prácticas cotidianas de la comunicación, pero principalmente en los procesos electorales.
La creación de las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) constituye la medida de mayor alcance dentro del sector agropecuario en los 90. En este artículo se analiza el proceso de descentralización y la apertura de nuevos espacios y mecanismos de participación de los trabajadores de las UBPC, esa importante forma organizativa de la economía agrícola mixta emergente.
“A partir de 1989, con la desaparición del campo socialista y el recrudecimiento de las medidas de los Estados Unidos contra Cuba, el modelo social cubano se ha visto sometido a grandes pruebas debido a la reducción de los recursos disponibles y reformas económicas que han introducido elementos de desigualdad en los ingresos. Algunos se preguntan qué ha quedado de este modelo y de sus logros, y qué subsiste del considerado por ellos como «utopismo contemporáneo». Este trabajo trata de dar respuesta a esas interrogantes a partir de la evidencia de los siete años ya transcurridos bajo un proceso de ajuste económico y de reformas…”
“Los estridentes debates y profundos desacuerdos sobre política sanitaria, la maternidad de alquiler (de vientre o de útero), la investigación con fetos, la venta y compra de órganos para trasplantes, etc. constituyen síntomas sensibles de la circunstancia posmoderna, pues reflejan la existencia de concepciones morales arraigadas y contrapuestas y, por ende, la imposibilidad de una moral universal, es decir, compartida y válida para todas las comunidades morales. Se insiste en la necesidad de una bioética para el vínculo entre extraños morales: personas, o más bien comunidades humanas --judíos, católicos, protestantes, marxistas, liberales, budistas, mahometanos, etc.--, que no comparten los mismos valores y principios morales, pero que se han propuesto resolver sus controversias pacíficamente…”
“Como expresión de la voluntad estatal respecto a la protección del medio y el uso racional de los recursos naturales, la política ambiental se manifiesta en un conjunto de principios y conceptos básicos que, en buena parte, se proyectan en estrategias y son formulados en una legislación. En tanto política ambiental que debe servir en gran medida al desarrollo sostenible, su análisis requiere ir más allá de la simple consideración de las variables ambientales para insertarse en el contexto socioeconómico nacional e internacional…”
“En la búsqueda de estrategias alternativas en América Latina y el Caribe durante las últimas dos décadas, sus sociedades muestran diversos niveles de respuesta, de acuerdo con las características que asume la crisis en cada nación. Sin embargo, existe un denominador común en todas estas experiencias sociales: la mayor parte han surgido de necesidades comunitarias de sobrevivencia. Debido fundamentalmente a esta característica, muchos movimientos comunitarios se definen como autogestionarios; llenan así un espacio del que se ha retraído el Estado. La reconstitución de estos espacios sociales propicia el surgimiento de nuevos liderazgos locales y facilita la presencia de actores externos como las ONG. Esto hace, evidentemente, más complejo el mosaico social…”
“Problemas tan acuciantes como la escasez y deterioro de la calidad del agua, la contaminación del aire, la degradación de los suelos, la desertificación, la pérdida de la diversidad biológica, el adelgazamiento de la capa de ozono y el calentamiento global, se han agudizado en los últimos años con el crecimiento poblacional, la urbanización y el desarrollo industrial, al incrementarse la cantidad y complejidad de los residuos generados y hacerse evidente que su tratamiento va más allá de una visión puramente científica o técnica. El formidable desafío que esto representa, y la mayor percepción de la repercusión negativa que pueden tener los proyectos de desarrollo en la vida material y espiritual de la sociedad, han sido importantes motivos de la creciente preocupación de gobiernos, organizaciones sociales e individuos por conservar y proteger el medio ambiente…”
“En un país isleño, pobre, pequeño y aislado, donde la mayoría de la población es urbana, parece lógico extender los principios de la sustentabilidad –inicialmente restringidos a garantizar el equilibrio en el medio natural– a la interacción del medio construido con el natural y el social, con la economía que lo sustenta o depreda, y con la política que lo canaliza o frena. La integralidad y el equilibrio deberán salir de la coexistencia mutuamente ventajosa entre el medio natural, el construido y el social, animados por una identidad nacional basada en una cultura de la convivencia, y una economía que funcione más allá de los intereses sectoriales perentorios. En la medida en que ello sea posible, Cuba podría aportar al mundo un nuevo modelo de socialismo sustentable…”
“La película La bella del Alhambra, dirigida por Enrique Pineda Barnet y basada en la novela Canción de Rachel de Miguel Barnet (quien también es coautor del guion), es una obra que tematiza de manera extrema el cuerpo de la mujer como objeto-fetiche de la mirada masculina. Pero la seducción nunca se da en el vacío, y este filme no es una excepción: vemos a la protagonista hacerlo siempre en situaciones que conllevan todo un complejo ideológico, en el cual sobresale la problemática de la simulación, y donde cabe cuestionar los fundamentos del machismo, el clasismo, el sexismo y la homofobia…”
“A mediados de la década de los 70, en parte como respuesta al hecho de que muy pocas mujeres eran nominadas y elegidas para ocupar cargos en el Poder Popular, el Partido cubano llevó a cabo una encuesta que reveló la existencia de sensibles diferencias en la cantidad de tiempo que las mujeres y los hombres invertían en las tareas domésticas. Hacia finales de esa década, y en respuesta a lo que se percibía como una «crisis» de la familia cubana --reflejada en las tasas crecientes de delincuencia juvenil, embarazos en la adolescencia, etc.-- algunas instituciones cubanas comenzaron a estudiar la familia desde distintos ángulos y valiéndose de diversas entidades. Sin embargo, hasta hace poco esos estudios no eran, en general, etnográficos…”
La intención de este trabajo no es ofrecer una lista más o menos completa de todos los artistas cubanos llegados de Cuba a partir de distintas fechas o formados en el exterior durante los casi cuarenta años de duración del proceso revolucionario cubano. Tampoco someterlos a una coreografía generacional o de estilos. Se trata, más bien, de pintar un fresco de apariciones generacionales a partir de acontecimientos o publicaciones especiales, de artistas que son casi desconocidos en Cuba.
“A las puertas de la próxima centuria, pocos estudios rigurosos se han publicado acerca del movimiento migratorio de la Isla hacia Estados Unidos. Si se toma en cuenta que la presencia ininterrumpida de cubanos en aquel país-destino por excelencia de estas migraciones en todos los tiempos- se muestra organizada ya en comunidades propias desde el siglo XIX, llama la atención el poco tratamiento orgánico que ha recibido el estudio de esta experiencia, por oposición a la de otros grupos inmigrantes radicados en ese territorio en igual época. En los pocos textos tempranos disponibles predominan relatos testimoniales y concentraciones temáticas, regionales y epocales, evidentemente determinados por la escasa información existente y accesible. Ello ha dado por resultado un universo bastante pobre de una realidad altamente compleja, de la que, por momentos, suelen desaparecer sus límites precisos…”
“Por encima de apariencias y estereotipos, la década en curso es escenario de transformaciones políticas y generacionales en la comunidad cubana en el exterior, visibles sobre todo en el caso de la radicada en los Estados Unidos, y específicamente en Miami, ciudad donde se concentra la mayor cantidad de emigrados y se ha estructurado el llamado enclave étnico. Como expresión de esos cambios, se ha incrementado la densidad de población y la variedad de procesos demográficos, unidas a una no menos creciente complejidad socioeconómica, fragmentación ideológica y activismo político…”
Este estudio es parte de un esfuerzo más abarcador por determinar las políticas de la representación visual, y su relación con el discurso, en el contexto de la modernidad; investiga la relación entre el discurso colonial, asociado con la iconografía temprana de las Américas, y las formas contemporáneas de representación de los pueblos indígenas y los mestizos (etnicidad híbrida) en las fotografías noticiosas y los anuncios televisivos de los Estados Unidos. El análisis se concentra en la persistencia y relativa importancia de las prácticas culturales del primitivo período colonial en la perpetuación de las relaciones (neo)coloniales, así como su influencia en la articulación de contradiscursos en un sistema transnacional globalizado.
“La igualdad de derechos y oportunidades para hombres y mujeres en la sociedad ocupa en la actualidad un lugar importante en la agenda internacional. En las principales conferencias mundiales celebradas en la década de los 90 se han vinculado los temas de desarrollo sostenible y de género. El mejoramiento de la condición de las mujeres y su acceso al poder, han sido aceptados como objetivos esenciales de toda estrategia destinada al logro de un mayor bienestar humano…”
“Lo no-dicho --en una obra de artes plásticas, lo no-visto-- está tan cargado de intensidad como lo presentado ante nuestros ojos; lo inasible se hace manifiesto en nuestra percepción del texto visual por medio de recursos formales que matizan y conforman la composición de la pieza. Para captar y desentrañar el significado de tales ausencias, el paratexto que es el título dado por el creador (o por el curador o el editor) a la obra, resulta a menudo imprescindible…”
“Lo único cierto en el umbral del tercer milenio es la incertidumbre, colectiva e individual, respecto al porvenir. Al concluir el siglo XX, los tres grandes déficits de nuestra especie son la sabiduría, la imaginación y la esperanza. La fascinante revolución tecnológica que hoy vivimos ha acelerado la velocidad de la historia humana; ha compactado nuestra actividad, al violentar las distancias y hacernos interactuar mundialmente a la velocidad de nuestros ordenadores. Hoy, las fronteras se han vuelto porosas a las influencias culturales y los flujos de capital y de información…”
“La humanidad vive los últimos días de su siglo XX sobre una paradoja: el vertiginoso desarrollo científico-tecnológico abre enormes posibilidades al ser humano para mejorar sus condiciones de vida; sin embargo, las relaciones de explotación y dominio que lo engendran permanecen inmodificables en su esencia. Y son estas relaciones las que producen las riquezas junto a las desigualdades, el buen vivir junto a las injusticias sociales, la modernización junto a la exclusión. Así, el avance de la humanidad en la ciencia y la técnica contrasta con el deterioro de las condiciones sociales y la decadencia cultural…”
“Quizá porque la familia es un grupo cuya comunicación, narrativa y dinámica diaria discurren en el marco de relaciones significativas y de carácter preponderantemente afectivo, constituye una de las instancias más poderosas dentro de los agentes socializadores y productores de sentido. En tanto institución y grupo humano, aquella es portadora de valores instituidos desde lo social (culturales, éticos, morales, religiosos, políticos, económicos), a la vez que se vuelve instituyente de sus propios valores, concebidos como síntesis única e irrepetible entre lo particular y lo general…”
“Aunque el debate acerca de la eutanasia data ya de varios siglos, aun en nuestros días los eticistas no han logrado ponerse de acuerdo en cuanto a su exacto significado. Es por ello que existen términos como “voluntaria e involuntaria”, “activa y pasiva”, que tratan de explicar diferentes matices en la actuación médica ante el paciente en tránsito hacia la muerte. En el medio profesional, a menudo los médicos afrontan dificultades a la hora de tomar decisiones ante un paciente crítico, sobre todo cuando se encuentra en el umbral de la muerte. Según estudios realizados, existe una gran confusión en cuanto a estos aspectos en el personal de la salud, e incluso entre los cubanos. Por eso resulta de interés abordar este tema tan polémico, específicamente en el ámbito de la medicina crítica, es decir, aquella que se ocupa de pacientes cuya vida está amenazada…”
“A cuarenta años del triunfo revolucionario del Primero de enero de 1959, el recuento y valoración de los acontecimientos y fenómenos que alumbraron una nueva correlación de fuerzas en el plano internacional no solo permite esclarecer los rasgos y causas últimas de esa hora de mudanzas en la política mundial, sino también identificar procesos y tendencias que irían ofreciendo diferentes contextos a la gesta revolucionaria y que aún se hacen visibles en la transfigurada y convulsa realidad de nuestros días. En consecuencia, parece pertinente ofrecer un inventario de los cambios habidos en el escenario internacional durante los años 1953-1958, delimitar su significación, fijar su rumbo y constatar su vigencia. Todo ello desde el punto de vista de la supervivencia y continuidad de la Revolución cubana…”
“Apenas unos meses después de la victoria de Fidel Castro se produjo un acercamiento a África, el continente que estaba empezando a recobrar su libertad. Che Guevara y Raúl Castro viajaron a El Cairo en junio de 1959 y julio de 1960, respectivamente, y Fidel Castro pronunció un discurso en Naciones Unidas en septiembre de 1960, en el que trató elocuentemente los problemas africanos. Se establecieron cordiales relaciones con unos cuantos países africanos, sobre todo Egipto, Ghana y Guinea; y especialmente con Argelia, que fue el primer amor de Cuba en África. Cuba le brindó ayuda tanto militar como civil, desde antes de que venciera el Frente Argelino de Liberación Nacional (FLN). La historia de la relación de Cuba con Argelia rompe con el estereotipo sobre la política exterior cubana que prevalece en los Estados Unidos y en muchas capitales europeas…”
Reseña de El arte de la espera. Notas al margen de la política cubana (Editorial Colibrí, Madrid, 1998), de Rafael Rojas. “¿Cómo sortear los riesgos de una reseña escrita para los no lectores, si el propósito no es el de alentar el entusiasmo con elogios ni el de justificar condenaciones con la crítica? En cualquier caso, aprecio la pertinencia de comentar obras que por un motivo u otro (o por varios a la vez) no llegarán fácilmente a las manos del lector cubano, aunque merezcan ser tomadas en consideración. Lo he hecho antes con agrado. Destacar la existencia de lo que merece ser considerado: esa es seguramente una razón suficiente para escribir sobre un libro…”
Si en un aspecto tienen consenso españoles e hispanoamericanos, es en la importancia que se le concede a 1898 como una fecha límite, indicativa de virajes y nuevos derroteros. Como se ve en este ensayo, también 1898 es un punto de reflexión y cambio en cuanto a la lengua, los modelos que se le trazan en su progreso, y los ideales al respecto.
(Capítulo del libro The Cuban Image (BFI Publishing, Londres e Indiana University Press, Bloomington, Indiana)).
“Casi al principio de Viva la República, filme dirigido por Pastor Vega, vemos escenas de la guerra hispano-cubana-norteamericana filmadas por la Compañía Edison. En una aparecen los Rough Riders de Teddy Roosevelt desembarcando en la Isla. Fueron de las primeras imágenes rodadas en Cuba. Con todo lo breves y primitivos que son, estos fragmentos no deben subestimarse. Por mínimos que sean como imágenes, fueron capaces de satisfacer la demanda de los espectadores. Se realizaron no para el público cubano, sino para el norteamericano, de la era de los «potentados ladrones», cuyos intereses habían sido cuidadosamente conformados por la nueva prensa masiva de la época, sobre todo por las dos principales cadenas de diarios propiedad de Pulitzer y de Hearst…”
¿Qué parámetros socioculturales han cambiado en esta década y han influido, a su vez, sobre los cambios de paradigmas del arte cubano? ¿En qué medida esto ha motivado que algunos elementos del nuevo arte cubano se confirmen o se transformen? Teóricos del arte y artistas, y personas activas en el escenario de las artes visuales de Cuba, convocados por Temas, discuten y analizan estas y otras problemáticas que van incidiendo en la década de los 90 del siglo XX.
Una reflexión sintética sobre algunas de las oportunidades y desafíos que le plantean a la proyección externa del socialismo que se construye en Cuba los abruptos cambios mundiales, regionales y nacionales de la última década. El texto sintetiza algunas de las tesis e hipótesis del ensayo inédito «El siglo XXI: oportunidades y desafíos para la Revolución cubana», cuyo primer esquema fue publicado bajo el título «Cuba: realidades y utopías», en Madrid-Cuba: Un puente de ONG (Madrid, 1996). Algunas de las ideas contenidas en este artículo también aparecen desarrolladas en «El Siglo XXI: 10 desafíos para la revolución cubana» (Análisis de Coyuntura, 1998).
“Existe una bien definida ideología del exilio cubano que, en lo referido a Cuba, difiere sistemáticamente de los criterios provenientes de sectores influyentes de la corriente principal de los medios masivos y el gobierno norteamericanos. El centro de esta ideología es el odio a Fidel Castro y, de manera más general, un acérrimo anticomunismo. Ha soportado la prueba del tiempo y los dramáticos cambios en el mundo, incluyendo el fin de la guerra fría...” (Este texto es una versión del capítulo «Transition and the Ideology of Exile», en Miguel Centeno y Mauricio Font, eds., Towards A New Cuba?: Legacies of A Revolution, 1997).
Este artículo profundiza en la intrincada relación entre el cambio climático y la pobreza energética en África, examinando los polifacéticos retos a los que se enfrenta el continente y destacando las posibles vías para un cambio transformador. Se exploran las repercusiones del cambio climático en sectores vitales como la agricultura y la salud humana, junto con un análisis del alcance de la pobreza energética y sus consecuencias socioeconómicas. El artículo hace hincapié en las oportunidades de soluciones sostenibles, incluidas las fuentes de energía renovables, las medidas de eficiencia energética, los sistemas descentralizados, los mecanismos de financiación innovadores y la integración de las políticas climáticas y energéticas. La conclusión subraya la urgente necesidad de hacer frente tanto al cambio climático como a la pobreza energética, y reclama una mayor cooperación internacional, inversiones nacionales sostenidas y apoyo político para fomentar una África más verde y resiliente.
Se propone buenas prácticas de autocuidado entre familias atravesadas por las migraciones, pertinentes para todas y todos en general. Las reflexiones conclusivas transitan por los aprendizajes identifcados en los vínculos con familias migrantes y el autocuidado responsable más allá de las fronteras, el cual se comprende como las prácticas concretas del cuidado de cada persona desde la ResponsHabilidad, término utilizado en los Talleres Experienciales de la Sección InterCreAcción.
La pandemia del COVID-19 suscita reflexión, estudios, debates, y grandes controversias. Por un lado, los científicos de la Biología, la Medicina, Virología, y la Epidemiología buscan respuestas sobre el virus y cómo conocer y contrarrestar su potencial de infestación, patógeno, y pandémico; por otro lado, se consideran las políticas de los gobiernos, y la respuesta de los ciudadanos ante tal emergencia sanitaria. El artículo explora las cuestiones filosóficas implicadas; algunas de índole ontológica y epistemológica que atañen a si los virus deben ser considerados partículas o seres vivos; y otras, a la ética de las políticas que estipulan los países y gobiernos en su respuesta a la circunstancia. Apelando a un número de filósofos contemporáneos, llama la atención a las limitaciones y consecuencias del reduccionismo filosófico, tanto en ciencia como en política ante la pandemia.
El ensayo se basa en el análisis de los conceptos de León Trotsky en relación con la economía política de la construcción del socialismo. Para el análisis se estructuró el ensayo en cinco aspectos, vinculados con la economía política de la construcción del socialismo: creación de la base técnico-material del socialismo; planificación centralizada; el mercado en la economía socialista; la propiedad social sobre los medios de producción; la gestión económica de las empresas en el socialismo. Se tuvo en cuenta las definiciones de esta materia por parte de la academia cubana.
El presente artículo explora algunas de las prácticas utilizadas por varias cubanas, a finales del siglo XIX, en su esfuerzo por dejar de ser una inspiración artística abstracta y convertirse en un agente escritor. Al establecer el reconocimiento, la influencia y el apoyo mutuos hacia un nuevo estatus historizado para ellas, en una era de modernización, se validaron a sí mismas y a las demás como poetas en su propio contexto histórico.
El artículo muestra, en un recorrido histórico, las acciones realizadas por la dirección revolucionaria desde los albores del triunfo rebelde hasta la actualidad, dirigidas a desterrar el burocratismo, reprimir la burocracia —ambos heredados y hasta renacidos—, así como emprender una política de cuadros socialista. Se presentan consideraciones teóricas sobre la relación burocratismo-burocracia que remiten, sobre todo, a V. I. Lenin, quien legó numerosas reflexiones acerca de este problema y cómo enfrentarlo en la transición socialista. Para el caso cuban, se utilizan las informaciones sobre el tema incluidas en los libros Documentos de la Revolución Cubana 1959 a 1969; en especial, las ideas y acciones de Fidel Castro y Che Guevara para erradicarlos y desarrollar una política de cuadros socialista. Además, se avanza en el tiempo en un intento por esbozar la situación de enfrentamiento al burocratismo-burocracia y la política de cuadros desde 2011 hasta 2021.
En el presente artículo se valoran los aspectos estéticos del filme Últimos días en La Habana (2017) de Fernando Pérez. El objetivo es dilucidar sus aportes esenciales a la cinematografía del autor y de qué modo canaliza sus inquietudes autorales en las formas de representación de las problemáticas sociales, políticas y culturales de la sociedad cubana, en particular de La Habana como metonimia de una insularidad conflictuada.
(Este texto obtuvo el Premio Temas (colateral) en la Jornada Científica Estudiantil de la Facultad de Artes y Letras, de la Universidad de La Habana.)
“Bien conocida es la polémica que trata de dirimir la cuestión de la pertenencia o no de la generación del 98 española al movimiento modernista. Negaciones y afirmaciones se han sucedido, en un vaivén que suele tornarse inacabable. Más que proposiciones taxonómicas, recetas de características que dividan o aúnen, mapas sistematizadores de tales o cuales tendencias que afilien o separen, urge a los estudios crítico-literarios que se acercan al tema una profundización en los textos, que son los que, al final, darán cuenta de lo que se ha tratado de dilucidar…”
“Desde 1898, con la primera intervención, la Enmienda Platt y posteriormente con la de 1906 y la injerencia por memorándums a partir de 1921, el pueblo cubano sentía escamoteada su independencia. Desde el principio, los políticos e ideólogos norteamericanos intentaron absorber a la Isla, no solo su economía, sino también su cultura, y en ello el idioma tenía una importancia vital. Nunca prosperó el bilingüismo en nuestro país, por lo arraigado de la tradición hispana. El mantenimiento del español formaba parte de la lucha por la nacionalidad y contra la anexión a los Estados Unidos…”
(Síntesis del libro La SAR. Historia de una mediación (1952-1958), publicado por la Editorial de Ciencias Sociales en 2003).
“El 28 de abril de 1948 se fundó la Sociedad de Amigos de la República (SAR). A fines de los años 40, la república neocolonial atravesaba por un momento crítico: los gobiernos conducidos por el Partido Revolucionario Cubano (Auténtico) eran responsables de la inestabilidad que predominaba dentro del sistema parlamentario burgués, la mayoría de los partidos tradicionales habían perdido consenso público y comenzaban a manifestarse los primeros brotes de rebeldía popular en las campañas públicas que condujo Eduardo Chibás, líder del Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxo). La corrupción administrativa y la manifiesta ingobernabilidad de las autoridades auténticas habían puesto de relieve que las instituciones burguesas de poder estaban afectadas por una crisis profunda. Por esos años la SAR aconsejaba aplicar un conjunto de reformas para reforzar la hegemonía política e ideológica de la burguesía; pretendía imponerle orden a la República neocolonial…”
(Premio Temas de Ensayo 2000, en la modalidad de Humanidades).
“De entre los movimientos literarios más atacados en la poética de Vicente Huidobro, el romanticismo es, sin duda, el que lleva la peor parte. Pero, paradójicamente, su presencia es tan contundente, que no logra engañar a nadie con su tímido disfraz. Tal vez no aborde aquí todo el caudal poético inicial de Huidobro como apoyatura de mi tesis, pero me gustaría entretenerme escarbando un poco en ese poema inmenso que resulta «Altazor»; al parecer, resultado definitivo y ciertamente maduro de la conformación de una poética, y que costó a su autor nada menos que doce años de ardua labor…”
“Si los años 60 nos ofrecen un campo literario efervescente y renovado en su confirmación continental, urge reconocer, treinta años después, la labor inconclusa de la certera y entusiasta crítica literaria acompañante de aquella producción, que legitima su condición de «clásica», de corpus ya establecido en la tradición literaria latinoamericana. Buena parte de esa producción crítica, por su incuestionable solidez, también ha ingresado a este corpus; sin embargo, contrariamente al modo en que valoramos las grandes obras literarias producidas entonces, hoy reclamamos de aquel discurso crítico-literario su capacidad de actualización, de continuidad; lo cual sería, más que pedir otro tipo de recepción, la mejor manera de comprobar el alcance que tuvieron, tienen o tendrán todavía muchas de aquellas propuestas analíticas: el reclamo consiste en una lectura actualizadora, que nos permita reciclar las ideas y aportes (conceptuales, teóricos, metodológicos, etc.) con que ese discurso podrá o no insertarse en la actual evaluación del campo literario latinoamericano…”
“¿Existe una presencia cultural de Iberoamérica en el mundo? ¿Cuál es su proceder frente al relumbre de las grandes potencias? ¿Se percibe una sensibilidad americana reconocida y distinguible en el escenario internacional o será necesario abrir brechas para la libre expresión de nuestra cultura en medio de las tentativas de uniformización? La concentración del poder mundial, característica de nuestra época, ha llevado a los Estados Unidos (como a China, Japón y los países europeos) a servirse de la cultura, en su acepción global, como elemento estratégico de las relaciones internacionales…”
“El sentido de la publicidad es convencer al consumidor de que el producto o servicio ofertado es el que mejor satisface sus necesidades y expectativas, a fin de que lo compre. Tal convencimiento requiere del publicitario un amplio conocimiento de las normas y valores que rigen en la sociedad en cuyo contexto se ubica el mensaje, del segmento o segmentos poblacionales con poder económico para consumir el producto, y de las bondades de este que sirvan a la autoafirmación del comprador en la realización de actividades exitosas, ajustadas a esas normas y a esos valores…”
“Nuestro proyecto de una teoría estética restringida al discurso narrativo-literario propone una nueva actitud intelectual, que pretende responder al desafío de los nuevos paradigmas. Corresponde a la continuación de una investigación que se remonta a los aportes del formalismo ruso, el estructuralismo del Círculo Lingüístico de Praga y que, pasando por una atención de varios años a la semiótica, desembocó en Literatura y realidad, basado en la hipótesis de que la realidad es una construcción social. El interés principal de este libro fue establecer que el discurso estético literario es un elemento, un factor primordial, de la constitución de la realidad sociocultural, y no su «reflejo»…”
“Cuando, el 21 de mayo de 1912, el Partido de los Independientes de Color (PIC) —el único partido político cubano (y el primero del hemisferio occidental) basado explícitamente en la raza—, inició una rebelión armada, los diarios la calificaron de brote: el comienzo o la aparición de algo nuevo. ¿Pero qué había realmente de nuevo en que el PIC protestara contra la Enmienda Morúa a la Constitución de Cuba, una medida legislativa que, dos años antes, lo había decretado ilegal?...”
“La desarticulación social marcó a la joven República cubana. Los hacendados apenas tenían otro recurso que confiar la reconstrucción económica del país al capital extranjero. La consolidación y expansión de los intereses españoles también limitó las oportunidades cubanas en el comercio, la industria y las actividades profesionales. Las diferencias nacionales y raciales dividieron a las clases populares. El desempleo, el subempleo y los bajos salarios acompañaron a la expansión del capital extranjero. El malestar de los trabajadores amenazó el orden, de manera que los primeros gobiernos debieron intentar mantener un entorno favorable a las inversiones extranjeras para evitar la intervención norteamericana. Contener a las clases populares se convirtió en la razón sine qua non de la joven República…”
“Una de las repetidas «verdades» que circula, por lo menos por esta orilla floridana del Estrecho, es que Cuba nunca fue «país de emigración». La historia de la emigración cubana, desde el siglo XIX hasta el presente, se percibe como una manifestación de las condiciones o trastornos políticos en la Isla, que obligaron a personas a abandonar el país y crearon una serie de «destierros» o «exilios», como usualmente nos referimos a esas emigraciones. Esa interpretación de la historia migratoria cubana como una serie de «destierros» con móviles políticos, tiene una cierta base en la realidad objetiva, sobre todo si nos limitamos al flujo más importante: el que se ha encaminado a los Estados Unidos…”
¿Cómo se relaciona el desarrollo científico con el contexto cultural? Intuimos que existen estas relaciones. ¿Pero podremos describirlas de manera estructurada y sistemática? ¿Nos puede ser útil esa descripción para potenciar las interacciones? ¿Tan claras como están nuestras especificidades culturales, pudieran estar algún día también nuestras especificidades en la creación científica? Estas son las preguntas que motivan las reflexiones que siguen. Van escritas en el lenguaje directo y afirmativo de las proposiciones (casi un lenguaje de laboratorio) porque pretenden iniciar discusiones, no concluirlas.
“Desde el punto de vista histórico, la «transición democrática» se ha comportado de manera coherente con los intereses del capitalismo; es un proyecto político y económico complejo, rico en experiencias nacionales y en bibliografía documental y analítica. El presente trabajo pretende incorporar algunas reflexiones acerca de la «transición democrática» como proyecto político, en general, y como variante que se promueve contra la Revolución cubana, fundamentalmente desde los Estados Unidos…”
“El presente artículo pretende esbozar algunos elementos generales de la relación migración internacional-desarrollo, a fin de ubicar el fenómeno en toda su multidimensión. En particular, tratará la manifestación de esta relación en países emisores de migrantes en las condiciones actuales de la región del Caribe. De forma general, el trabajo expresa como hipótesis la necesidad de comprender y analizar la realidad y las políticas migratorias regionales, a la par de los asuntos del desarrollo integral y la planificación económica…”
“A propuesta de los Estados Unidos, en la XXIII Cumbre de los países más industrializados del mundo (G7), realizada en Denver, en 1997, se definieron las políticas que regirán el Nuevo orden mundial bajo la hegemonía de ese país. Los líderes del G7 y Rusia se comprometieron a combatir la inmigración ilegal [sic] en sus fronteras, y a intercambiar tecnología e información de inteligencia para luchar contra ese fenómeno. El párrafo dedicado a la inmigración indocumentada se incluyó en el capítulo «Delincuencia transnacional organizada», del Informe de los Ministros de Relaciones Exteriores de este grupo…”
“Los desplazados son un nuevo fenómeno migratorio en la historia del fin del siglo XX. Se trata de un comportamiento poblacional que se está repitiendo en todas aquellas regiones en las que los pueblos luchan por la democracia, la autonomía y el respeto a su identidad: Ruanda, Kosovo, Timor, Chechenia y, por supuesto, Chiapas. Los desplazados son también la consecuencia de un Estado autoritario, en el mismo sentido descrito precedentemente, pero estas poblaciones sufren una total desprotección legal, ya que no se les asigna un estatus reconocido por organismos internacionales y, por lo tanto, no hay ninguna obligación para las comunidades receptoras, más allá de ejercer la solidaridad humana, que por supuesto no es poca cosa…”
“Se afirma que, si bien en cada país los inmigrantes han sido incorporados al sistema social, educativo, laboral y político de diferente manera, al no ser ciudadanos por nacimiento en un territorio nacional y no compartir la identidad cultural mayoritaria, se mantienen políticamente marginados. Ante los crecientes flujos migratorios hay dos dimensiones de este tema. Una es si es posible excluir y marginar de derechos a quienes no han nacido en el Estado-nación; la otra, si se considera que quien decide emigrar de su país de origen pierde sus derechos políticos, a pesar de que en muchos casos mantiene con él fuertes vínculos sociales, culturales y económicos. Estas interrogantes corresponden a los desafíos filosófico-políticos de un mundo globalizado, pero sobre todo representan un cambio profundo en la definición de membresía política…”
El objetivo de esta mesa redonda, convocada por Temas, es reflexionar sobre cómo se produjo, en el período de 1902 a 1958, la recepción martiana. Los participantes reflexionan sobre el modo en que los hombres del siglo XX conocieron la obra de José Martí; la forma en que influyó en el pensamiento político cubano y en buena medida en el pensamiento social, y la cultura artístico-literaria, y el uso que se hizo de Martí en la praxis política.
“Causa vértigo considerar por un momento que el lienzo en el que están pintadas Las Meninas fue, antes de que Velázquez pusiera sobre él los primeros trazos de su carboncillo, un lienzo vacío. Sabemos que el vacío físico no existe, pero, indudablemente, el vacío espiritual sí. Podemos pensar que, en definitiva, se referían a esa indecible actitud del pintor frente al lienzo vacío, capaz de generar espacios imaginados. Lo mismo sucede cuando el escritor se enfrenta con la famosa página en blanco de la labor literaria. Hay también aquí un vértigo, un miedo casi. El espacio blanco de la hoja, como el del lienzo, adquiere una vida extraña, una realidad desconcertante, porque está pidiendo calladamente que le sea sobrepuesta otra realidad: la realidad imaginada. ¿Y cómo experimentamos ese espacio en tanto espectadores de la pintura o lectores de la novela?...”
“El propósito de este artículo es abordar, desde el prisma del sujeto de la época, el modo en que el lenguaje expresa la progresiva subversión de valores ocurrida durante los primeros diecisiete meses de la joven Revolución cubana. Ello no implica abordar el lenguaje desde sus determinaciones semióticas o estructurales, sino como indicador de la contradictoriedad del cambio en la totalidad social. La ambivalencia del lenguaje permite tanto la incorporación de nuevos significados a viejos signos como el surgimiento espontáneo de otros completamente nuevos. El lenguaje, al cumplir con su función de designar lo real, es el vehículo que objetiva el acontecer de la convulsión social y le ofrece así al partícipe la posibilidad de nombrar los nuevos eventos en que está inmerso…”
¿Qué se entiende por marginalidad social, económica, cultural? ¿Cuáles son sus rasgos y las teorías que la explican? ¿Qué rasgos tiene la marginalidad en Cuba? ¿Cuál es la formulación teórica que explica, en una sociedad como la nuestra, que ya no es capitalista, que sí tiene un alto nivel de prevención social, y que aún conserva políticas de fuerte integración social, la presencia y la persistencia del fenómeno de la marginalidad? ¿Se trata de algo heredado, que no hemos podido superar, que acompaña los rasgos de subdesarrollo que no hemos podido resolver? ¿O existen condicionamientos en las actuales circunstancias mundiales, que producen o reproducen el fenómeno como algo inédito en la sociedad cubana del nuevo siglo?
“En el cine de Wim Wenders, el nudo antropológico no es un acento, un aliento, ni siquiera un tema; es una obsesión, paranoia que argumenta toda la poética. Aun para criticar desde el panfleto a la cultura americana y su pragmatismo, Wenders no puede dejar de usar sus moldes. Su relación de amor-odio con la cultura norteamericana pregona el odio y se reserva el amor para la intimidad. Adora el cine de género; siempre he pensado que sería definitivamente feliz si resolviera irse de una vez a Hollywood para rodar peliculitas funcionales de sábado en la noche. Su mejor película me sigue pareciendo El estado de las cosas, justo porque el autor se sacude el engaño de la inmortalidad y narra una historia sencilla, en una gramática posible, sobre sus eternas dudas en torno a la producción y la dirección de cine. No me explico entonces cómo alguien pueda asombrarse de que Wim Wenders se haya subido tempestuosamente al carro del documental Buena Vista Social Club, proyecto que traía para él un supuesto agravante: hablar de una cultura que no conoce…”
“En los últimos años del siglo xx, hubo un cambio significativo en la sensibilidad y las perspectivas de críticos y artistas. De hecho, me atrevería a decir que se está gestando un nuevo tipo de trabajador cultural, asociado a políticas de la diferencia. Estas nuevas formas de conciencia intelectual permiten vislumbrar una reconcepción de la vocación de crítico y artista, que trata de socavar las divisiones del trabajo prevalecientes en la academia, los museos, los medios masivos de difusión y las redes de galerías, aunque mantienen modos de crítica en ubicua comercialización de la cultura en la aldea global. Los rasgos que distinguen a las nuevas políticas culturales de la diferencia son condenar lo monolítico y lo homogéneo en nombre de la diversidad, la multiplicidad y la heterogeneidad; rechazar lo abstracto, lo general y lo universal, a la luz de lo concreto, lo específico y lo particular; e historiar, contextualizar y pluralizar, poniendo énfasis en lo contingente, lo provisional, lo variable, lo tentativo y lo cambiante…”
“¿Cómo puede evitar la puesta en práctica del multiculturalismo operar al nivel de la representación estética de los muchos rostros de la nación? ¿Cómo puede la práctica del multiculturalismo evitar su dispersión e inclusión en la función socializadora de la escuela, que ha permanecido inmutable en su misión de engendrar «el tipo correcto de orgullo nacional?». Según la lógica del multiculturalismo, ¿quién sentiría este «orgullo nacional», habida cuenta de que, en sus respectivas culturas, individuos y grupos diferentes tienen versiones diferentes de la nación? Estas son algunas de las cuestiones que serán abordadas en este ensayo. Sin querer que parezca que me estoy pronunciando contra los objetivos del multiculturalismo en cuanto al otorgamiento de derechos políticos, examinaré los proyectos de dos de sus más influyentes propugnadores norteamericanos…”
“Basta mirar alrededor para darnos cuenta de que, hoy en día, constantemente se están poniendo en discusión temas de identidad. Estos temas tienen que ver con necesidades y políticas institucionales, y con decisiones importantes. Pero hay una razón más universal y general para fundamentar el interés en ella. No solo se trata de una necesidad cognitiva (hacer y conocer nuestro lugar en el mundo) y práctica (por urgencias económicas, políticas o sociales); es también una necesidad existencial. Se ha podido constatar, por la simple evidencia empírica de las alteraciones psicológicas que produce su desestructuración, represión, manipulación extrema, cambio súbito o destrucción intencional, que la identidad, ha sido y sigue siendo una necesidad para las personas y los grupos humanos, al menos por ahora, en nuestra cultura y para las generaciones actuales…”
(Mención especial en el Premio Temas de Ensayo 2001, en la modalidad de Humanidades.)
“Cuando «lo marginal» llega a convertirse en central, todo se relativiza en una bastante homogénea «lateralidad social». Por esta vía puede aducirse que la sociedad cubana vive en el borde, en el espacio lascivo y ahorita planimétrico de lo lateral. Los lados se extienden hasta el todo; los márgenes dejan de serlo. Muchos de los valores que una antropología escrita desde la alta cultura consideraría degradados, impertinentes, truecan el estigma en prestigio y confirman la marginalidad como una fuente de hallazgos y realizaciones donde, en ocasiones, el propio antivalor genera el valor…”
“Probablemente uno de los puntos en los que existe, en la actualidad, un mayor acuerdo, sea el de que eso que solemos llamar actividad política debe tener lugar en el marco de la democracia. El acuerdo es tan grande como sorprendente. Porque, sin entrar ahora en su análisis, resulta llamativa la constatación, llevada a cabo por reputados científicos sociales, de que en todo el mundo sectores procedentes del autoritarismo conservador más antidemocrático están asumiendo el modelo de la democracia —aunque, eso sí, sin abdicar de su pasado. En cierto modo, pues, podríamos decir que la cuestión política ha terminado, en el mundo de hoy, por identificarse con la cuestión democrática…”
“En este artículo, llamo la atención sobre dos de los campos de estudio de las ciencias políticas donde se ha logrado cierto avance en los diagnósticos. Estos podrían servir para una reflexión general sobre problemas contemporáneos pendientes en diversos países. Hago un resumen de algunos aspectos metodológicos de los estudios de opinión pública, la rama más desarrollada y de aplicación más general de las ciencias políticas. Este campo fue en su inicio muy académico, pero el estudio de la opinión pública ya es una industria con cuantiosos ingresos económicos, impacto sobre el comportamiento de políticos y de los partidos, e importante instrumento para conocer la opinión democrática de un pueblo…”
“Los estudios económicos sobre los países de reciente industrialización o NICs son abundantes. Todos subrayan el éxito excepcional de sus economías y la de los países asiáticos que han optado por ese modelo: Malasia, Tailandia, Indonesia y, en menor medida, Filipinas. Los cuatro dragones —Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong y Singapur— representan una parte del comercio mundial igual a la que representa Francia o Japón. En los últimos veinticinco años han más que doblado su participación en el comercio mundial y sus exportaciones han sido multiplicadas por cuatro. De aquí a proponer estos cuatro países como modelos para el resto de países del Sur, hay apenas un paso, y muchos no dudan en darlo. Por eso es de utilidad estudiar más de cerca las condiciones, internas y externas, que permitieron el despegue, las prioridades, el papel del Estado, así como los costos sociales y políticos y su evolución reciente…”
Reseña crítica del artículo «El abrigo de aire», de Antonio José Ponte, publicado en la revista Encuentro de la Cultura Cubana (Madrid, 2000)
“Si «El abrigo de aire» hubiese intentado una desacralización de Martí según la tesis de «no levantar estatuas para que no se nos pierda el hombre en el mármol», podría haberse asumido como un punto de vista, discutible o no, en la siempre difícil tarea de enfrentar el pasado. No es el caso: estamos ante un intento de banalización de la figura más importante de la historia de Cuba y de uno de los pensamientos más trascendentes de nuestro continente. Un intento que, por lo magro de sus argumentos y la brevedad del análisis, resulta ridículo…”
“A diferencia de otras regiones de Occidente, en América Latina no puede hablarse de renacimiento del pensamiento geopolítico, pues la disciplina fue cultivada activamente desde los años 30, muy especialmente en los círculos militares, con resonancia pública y de manera casi ininterrumpida hasta hoy, aunque experimentando modificaciones significativas y vinculándose a otras proyecciones ideológicas. Si bien presente en varios países del subcontinente, la geopolítica ha tenido su centro principal en Brasil y los países del cono sur, en especial Chile y Argentina, y ha permeado el pensamiento de las élites militares y políticas…”
“Desentrañar los motivos dominantes en la obra de Humberto Solás ha derivado, con demasiada frecuencia, en la simplificación. Sobredimensionar el interés del cineasta por el pretérito obstruye el análisis de sus filmes como portadores de observaciones transferibles al presente. Solás fue el primero de nuestros cineastas en defender ardorosa y racionalmente la plena vinculación de la mujer al núcleo activo de la sociedad, sin obviar las desgarraduras, renunciamientos, empachos de «nueva» moral, e incluso soledad y frustración que necesariamente conlleva tal integración…”
Por su repercusión social, el envejecimiento sociodemográfico constituye un proceso de importancia creciente para la actuación de políticas que permitan enfrentar el fenómeno como conquista social. En Cuba, considerada una de las poblaciones más envejecidas de América Latina, el tema reviste significativa atención para articular acciones que faciliten como proyección humanista del proyecto revolucionario, la construcción del socialismo. En tal contexto se perciben cambios estructurales que por su impronta en la sociedad, deben ser tratados y considerados por la política social como espacios para la transformación de su propia realidad, así como el análisis del impacto del envejecimiento poblacional en la estructura socioclasista y, en las dimensiones e indicadores del bienestar del adulto mayor.
Con el fin de promover el envejecimiento saludable en el municipio Plaza de la Revolución, de La Habana, se propone la conceptualización de una estrategia comunicativa. Para ello se sistematizan los fundamentos teóricos sobre comunicación para el cambio social, empoderamiento ciudadano, y se define una ruta metodológica participativa como sustento del proceso de planeación estratégica en comunicación en el marco del proyecto PIES-Plaza.
El envejecimiento demográfico es un tema de creciente interés, complejidad e importancia a nivel mundial. Hasta donde se conoce, este fenómeno no afecta a las poblaciones de plantas y animales de modo espontáneo, sino solo en el caso de que los seres humanos interrumpan intencionalmente sus ciclos de vida. Puede decirse que hasta hace unos doscientos años no existía en el mundo ninguna población humana «envejecida», en el sentido que hoy le damos a ese término, pues en todas predominaban abrumadoramente los niños, adolescentes y jóvenes...
Hablar de ternura como derecho pareciera ridículo. Afirmar la felicidad como exigencia política pareciera, en términos conservadores, una utopía, y en términos fundamentalistas, una estupidez. ¿Por qué? ¿Qué lugar tienen los afectos en el orden social humano? ¿Todo paradigma coloca la felicidad en igual dimensión? ¿La ternura es afirmación posible de la vida pública o reducto del mundo privado? ¿La felicidad como contenido cabe en la política realmente existente, o es una quimera allende la historia? ¿La felicidad y la ternura son de vocación individual o esencia del orden social liberador? ¿Son viables estas preguntas, al menos como preguntas, en los tiempos que corren, donde la anomia social, el individualismo desmovilizador y la crisis de paradigmas colectivos muestran signos punzantes?
El artículo reconstruye y analiza la vida y obra de François Houtart, dando cuenta de la articulación creativa entre sociología urbana, sociología de la religión y activismo sociopolítico, que lo condujeron a constituirse en referencia mundial de la Teología de la Liberación y las luchas mundiales anti–capitalistas y anti–globalización, cuya última expresión la constituye su propuesta del Bien Común de la Humanidad.
“Los educadores en general, y los formadores de profesorado en particular, tienen un papel decisivo en el mundo de hoy. En primer lugar, volver a los educandos más conscientes de la interdependencia entre los acontecimientos y fenómenos locales y los globales; en segundo, identificar los males de la civilización contemporánea y sus causas; en tercero, romper con el espartillo disciplinar y realizar una educación que promueva el desarrollo global de sus educandos. Para hacer frente a la globalización y a la complejidad del mundo contemporáneo, es necesario desarrollar en los educandos el pensamiento complejo, la creatividad, la afectividad, la ética y el espíritu crítico…”
Este ensayo aporta una visión breve y actualizada de la disponibilidad y uso del correo electrónico e Internet en Cuba, hoy. Ofrece la información más actualizada (hasta mediados del 2001) sobre el acceso a esos recursos, presenta algunos de los argumentos políticos actuales utilizados en el exterior para explicar las limitaciones en la disponibilidad de recursos e intenta explicaciones alternativas que sitúan a la Isla dentro del contexto de los problemas afrontados por los países en vías de desarrollo. También describe el modelo cubano de inclusión digital, que busca integrar al país dentro de la revolución global en las tecnologías de la información y la computación (TIC). No intenta presentar un recuento histórico sobre los orígenes y el desarrollo de los servicios de correo electrónico e Internet en Cuba, debido a que tales estudios ya se han realizado.
“Con este ensayo me propongo analizar las opiniones de Juan Marinello sobre el papel de la intelectualidad en la sociedad cubana en el período 1923-1940, cuando él mismo se movió, laboró e interactuó dentro del grupo de vanguardia literaria, artística y política. Es conocido que este escritor y revolucionario vivió 78 años, de los cuales dedicó casi sesenta a la reflexión y creación literarias. Por esta razón, decidí seleccionar solo un corto período de su vida para repasar su intensa actividad cultural y política: su juventud y primera madurez. Algunos estudiosos reconocen este período como la etapa formativa de su labor intelectual…”
“Por fortuna, durante las dos últimas décadas los estudios sobre la obra de Gertrudis Gómez de Avellaneda se han incrementado de manera notable. Podría afirmarse que es una autora de moda en los medios académicos, especialmente de los Estados Unidos. Y este resurgimiento se debe, sin lugar a dudas, al desarrollo de la crítica feminista y su radical reelaboración del canon literario. Esta ha sabido valorar el compromiso —enraizado firmemente en la calidad estética— de la prolífica autora cubana, y su ubicación en la primera línea de la literatura hispanoamericana del siglo XIX…”
Este simposio aborda un grupo de problemas centrales para la comprensión del imperialismo contemporáneo, tanto desde el punto de vista teórico, como político y estratégico. Aunque algunos autores contemporáneos han asumido que tal fenómeno ha dejado de existir —y en su lugar ha aparecido algo llamado «la globalización»—, aquí se parte, por el contrario, de que existe hoy en una medida inusitada, y se trata de averiguar precisamente en qué consiste. Participan tres destacadas personalidades del pensamiento social y político contemporáneo. El resultado ha sido este texto compacto y rico en interpretaciones de fondo sobre el fenómeno imperialista.
“Hoy en día, la mayor parte de los análisis que podrían tenerse como serios y que justifican el uso del término «imperio», en relación con los Estados Unidos, en realidad apenas parten de una analogía, implícita o explícita, con la Roma imperial. Pero una analogía no es una teoría. Resulta sorprendente la ausencia de enfoques serios desde la perspectiva de la economía política o de algún patrón de determinación histórica que pudieran explicar el surgimiento y reproducción del actual imperio norteamericano, así como las dimensiones de la opresión y explotación estructurales que de él derivan…”
(«Introducción» a la reedición de El imperialismo, fase superior del capitalismo, de V. I. Lenin (París, 2001), enviado por el autor especialmente para su publicación en español en Temas) “Hay vocablos cuya capacidad de captar lo real no ha perdido nada de su eficacia. Imperialismo es uno de ellos, y sigue gobernando una constelación conceptual en la que, por lo demás, capitalismo, explotación, propiedad, clases y lucha de clases, democracia social, transición revolucionaria, conservan su sentido cabal. Los candentes debates actuales en torno a la definición y la periodización de la mundialización recuerdan los argumentos que, a principios del siglo XX, acompañaban la caracterización del imperialismo…”
“Uno de los rasgos más categóricos de la victoria ideológica del neoliberalismo ha sido su capacidad para influenciar decisivamente en la agenda teórica y práctica de las fuerzas sociales, las organizaciones de masas y los intelectuales opuestos a su hegemonía. Si bien este atributo parecería haber comenzado ahora a recorrer el camino de su declinación, reflejando de este modo la creciente intensidad de las resistencias que, a lo largo y a lo ancho del planeta, se erigen en contra de su predominio, las secuelas de su triunfo en la batalla de las ideas están llamadas a sentirse todavía por bastante tiempo…”
“En las condiciones del mundo contemporáneo, la seguridad de las naciones, e incluso de los propios individuos, rebasa el marco de su prioridad tradicional —entiéndase el problema militar— al que ha estado circunscrita desde su surgimiento y, en consecuencia, adopta una connotación global que depende no solo de la falta de violencia y la prevención eficaz o la eliminación de la agresión, sino también del mejoramiento de la capacidad para responder a las necesidades básicas del ser humano y de la sociedad. En esa extensión de las prioridades de seguridad se desenvuelve el imperialismo actual, el cual, a la par que conserva sus rasgos tradicionales como fase superior del capitalismo, incorpora, con inusual fuerza, la transnacionalización económica, en medio de un indetenible proceso de globalización dispar e insostenible para la mayoría de las naciones…”
“Para los conservadores, el 11 de septiembre brinda un contrapeso imperial al triunfalismo mercantil de la época de Clinton, y una oportunidad para crear una cultura política internacional e interna que signifique algo más que el dinero y los mercados. Pero ese imperio que han vaticinado puede que no brinde tan fácil solución a los retos políticos y culturales que afrontan los Estados Unidos desde que terminó la Guerra fría. Ya el imperio norteamericano venía tropezando con enormes obstáculos en el Medio Oriente, que daban justamente la medida de cuán escurridiza era en verdad la idea que primaba en los nuevos imperialistas: que los Estados Unidos podían regir el curso de los acontecimientos y hacer la historia. Internamente, la renovación política y cultural que muchos esperaron como consecuencia del 11 de septiembre no se está logrando fácilmente, en manos de una ideología de libre mercado que a todas luces no se debilita…”
“El imperialismo es una parte integrante de la economía-mundo capitalista. Siempre ha estado ahí. En este momento estamos padeciendo una forma particularmente agresiva y atroz de imperialismo, que ya está incluso dispuesto a proclamar su naturaleza imperialista. ¿Cómo es posible? ¿Por qué habría de hacerlo? La respuesta que ofrece la mayor parte de la gente es la fuerza de los Estados Unidos. Y la que yo voy a dar, en una palabra, es su debilidad.
“Los estudios sobre el imperialismo actual no pueden limitarse a recolecciones y análisis de datos recientes acerca de la dimensión económica de las sociedades, seguidos de otros relativos a sus funestas «consecuencias» sociales, ni es suficiente llegar solo a comprensiones conceptuales acerca de aquella economía. Los análisis del imperialismo deben incluir su estrategia contra la formación de alternativas rebeldes a su dominación, y también considerar las formas y el grado en que la naturaleza actual de ese sistema favorece o debilita su propia estrategia. Solo así ayudaremos a la tarea crucial de relacionar la caracterización del enemigo de la vida humana y del propio planeta en que vivimos con el pensamiento y las propuestas de un movimiento plural que tiene como denominador común lograr cambios radicales y contribuir a la creación de «otro mundo posible»…”
“¿Es la globalización un proceso socialmente neutro, capaz de homogeneizar todas las economías nacionales del planeta, y que descansa, en lo fundamental, en la implantación acelerada de los adelantos de la ciencia y la tecnología en el ámbito mundial?, ¿o, por el contrario, es parte consustancial del desarrollo desigual y deformado del capitalismo y, especialmente, del imperialismo? Este ensayo indaga cuál es el lugar histórico en que debemos colocar las complejas tendencias objetivas y subjetivas —económicas, sociales, políticas, científico-técnicas, ideológico-culturales, nacionales e internacionales— que se sintetizan en el tan utilizado, polisémico e impreciso concepto de globalización...”
Panel de debate dedicado a los factores que inciden en el éxito artístico. ¿En qué medida el mercado es una motivación, una restricción, o una imposición?, ¿en qué medida es un estímulo? ¿Cómo se crean patrones de consumo artístico inducidos por el mercado, y cómo estos afectan la producción artística?
Entrevista al doctor en Economía Norman Girvan, secretario de la Asociación de Estados del Caribe (AEC). El profesor jamaiquino comparte sus opiniones sobre temas relevantes para los países del área del Gran Caribe y también para todos los demás integrantes de la llamada «aldea global».
El activismo académico antirracista plantea preguntas urgentes sobre el papel de las universidades contemporáneas y los académicos que trabajan en ellas. Mientras profundas crisis sociorraciales chocan con movilizaciones antirracistas masivas, este libro se centra en las prácticas de académicos que trabajan dentro y en contra de sus instituciones en pos de la justicia social antirracista. En medio de una dura crítica del carácter neoliberal e imperial de la universidad, Joseph-Salisbury y Connelly sitúan la universidad como un espacio en disputa, lleno de contradicciones y tensiones. Basándose en datos empíricos originales, el libro considera cómo los activistas académicos antirracistas sortean barreras y reacciones negativas para aprovechar las oportunidades y recursos de la universidad al servicio de las comunidades de resistencia. Al mostrar que las prácticas del activismo académico antirracista son complejas, diversas y multifacéticas, y prestar especial atención a cómo los activistas académicos lidian con sus propias complicidades en los daños perpetrados y perpetuados por las instituciones de educación superior, este libro, y el manifiesto representado en el último capítulo, es un llamado a las armas para los académicos que están, o quieren estar, comprometidos con la justicia social.
Desde una perspectiva crítica con respecto a la teleología del Estado-nación y los presupuestos nacionalistas de los sistemas políticos liberales —con particular interés en los espacios soberanos resultantes de la crisis imperial-monárquica de 1808-1825—, avanzar en el estudio de la (re)configuración colonial posrevolucionaria parece imprescindible si se pretende dar cuenta de la manera en que se diseñó un nuevo orden político decimonónico, sobre todo en lo concerniente las políticas de justicia y orden público, tanto en España como en sus territorios de ultramar. El artículo presenta sucintamente los presupuestos de partida de dicha renovación historiográfica y los cuestionamientos que se aplican hoy al estudio de las instituciones y el imaginario político del primer cuarto del siglo XIX en Iberoamérica, proponiéndolos como instrumentos de análisis pertinentes para dar cuenta de la recomposición institucional, política y cultural que vivió Cuba después de 1808.
Después de lograr tan difícilmente su independencia nacional en el siglo XIX, los intelectuales hispanoamericanos sentían la necesidad de definir lo que debían ser las nuevas naciones, incluyendo la categoría de género, que se insertó en todo quehacer cultural y político. Este trabajo examina algunas obras de escritores de República Dominicana (RD) en esa centuria, para descubrir cómo se presenta de manera particular la visión que de «la mujer» se construía en esa identidad nacional —formulada en la lírica, la narrativa, el teatro, en discursos y ensayos. Los textos incluyen muchas de las dimensiones entonces, y tradicionalmente, relacionadas con lo femenino: la amada, virgen y bella; la madre, abnegada y centro de la familia (lo prescrito y emblemático), la naturaleza barbárica (lo oscuro y temido), la maestra y la poeta (lo permitido). Estos textos trataron de instaurar un dominio homogéneo —una sociedad sin clases, racialmente unida y estable a través del tiempo— a partir de expresiones que articulan elementos heterogéneos en las particularidades de sus enunciados y así se muestran contradictorios (y de ahí las «bellas mentiras»). Queda claro que el intento de los textos fue una continuación de las normas de la colonia, o sea, europeas. Solo en sus intersticios discursivos —expresados con frecuencia en términos negativos— se vislumbra una visión más compleja, más concorde con la realidad social dominicana, en la que ellas participaban plenamente en los campos de la educación y la cultura.
¿Qué connotación (social, política, ideológica, cultural, económica...) tienen hoy "irse" y "quedarse" y cómo contrasta o no con el pasado? ¿Qué retos enfrentan los que se van en la adaptación a la sociedad de destino? ¿Cuán diferenciado o peculiar es el flujo de los que se van ahora respecto a la idiosincrasia de la sociedad emigrada? ¿Cuánto se van los que se han ido en los últimos años?
Reseña crítica del reciente libro de Michael J. Bustamante, Cuban Memory Wars: Retrospective Politics in Revolution and Exile, que detalla argumentos y discusiones orales y escritas formulados tanto en Cuba como en los Estados Unidos sobre la Revolución cubana a lo largo de sus primeros veinte años. Este ensayo sostiene que lo mejor del libro de Bustamante es su énfasis en la movilización y la contestación de la historia y la memoria y que está menos desarrollado en aspectos referentes a género, raza, sexualidad y derechos humanos.
(La versión en inglés de este texto apareció originalmente en CounterPunch. Su autora lo revisó y amplió para este número de Temas) “La afirmación de que la religión y la política son inseparables resulta una perogrullada. Sin embargo, eso deviene un tanto más claro y resaltante a partir de la observación lógica consecuente: el Islam, tal como lo conocemos hoy, y los propios métodos con que intentamos entenderlo, y el discurso en el que intentamos ubicarlo, forman parte de una construcción occidental e imperialista. No existe un «verdadero» Islam aislado de ese contexto, tal como no ha existido jamás un Islam «verdadero» o «esencial» (o, para los mismos efectos, un judaísmo y un cristianismo «verdaderos» o «esenciales») aislado de los diferentes contextos socioculturales por los que ha atravesado durante su historia…”
“La definición de la Teología de la Liberación como espiritualidad sigue plenamente vigente y se ha diversificado. Ha nacido una espiritualidad indígena o afroamericana, una propia de la mujer o de los jóvenes, una campesina y otras. Ha desarrollado una ética espiritual de la vida, como valor absoluto, una espiritualidad del ser y del compartir, contra la arrogancia del tener, acumular y consumir. También ha desarrollado una espiritualidad de la vida, en su expresión corporal, liberada de la opresión de la ley y del pecado…”
“A fines de los años 60, desde su cátedra en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), Noam Chomsky ya había revolucionado la lingüística. Se ha dicho que es «el más importante intelectual vivo», y que —se esté acuerdo con él o no— siempre se pierde al no escucharlo. Un rápido recorrido por su vasta obra politológica, denotaría las obsesiones de este hombre: el poder, el control social, el papel de los intelectuales orgánicos del capitalismo, las raíces de la política exterior norteamericana, las corporaciones transnacionales, el poder de los medios de difusión en la «manufactura del consenso», la democracia, el neoliberalismo, el terrorismo. Temas pone a disposición de sus lectores este encuentro con la palabra viva de Noam Chomsky, uno de los pensamientos críticos más estructurados y completos de nuestra época”.
“El objetivo de este trabajo no puede ser el de presentar, en unos cuantos y apretados brochazos, la obra de Michel Foucault. Contra ello conspira su vastedad y complejidad. Como tampoco lo es el de hacer la historia de su recepción en Cuba, porque apenas se ha dado. Lo peor no es que para muchos de nuestros intelectuales el nombre del teórico francés sea una referencia exótica, sino que el eje de sus preocupaciones —los efectos constitutivos del poder y la dominación sobre todas las formas de actuación y pensamiento humanos, la relación entre el poder y la construcción de los saberes y los modos del pensamiento, el estatuto epistemológico de la política y las funciones políticas del conocimiento—, constituya para ellos un continente no ya inexplorado, sino ni siquiera sospechado. Enclaustrados en la mazmorra gnoseológica de las ciencias sociales, la importancia de la teoría crítica y de sus principales cultores sigue sin motivar a los que no saben o no quieren saber la significación de la reflexión sobre las condiciones de posibilidad de las producciones humanas…”
“Pocos términos como el de comunidad son tan útiles para comprender el espacio social, cultural, político, económico de las luchas (Derrida), el pluralismo espacial de filosofías y narrativas (Foucault), el de las acciones intercomunicativas (Habermas), o la variación geográfica de las relaciones de explotación, depredación, esclavización y colonización, cuyo análisis apenas iniciara Marx. La categoría comunidad es un auxiliar precioso para la generalización y la explicación en el pensamiento crítico de las ciencias sociales. No solo sirve para construir los conceptos y estructuraciones de la opresión y el despojo, o de la explotación y las mediaciones, sino los conceptos y las estructuraciones de la liberación de los pueblos y los trabajadores….”
“Este trabajo tiene como objetivo comprender algunos elementos rectores de las dinámicas socioculturales, que sirven de marco a la participación de los distintos actores locales en el desarrollo cultural. Para ello, en primer lugar, parece indispensable trazar una ruta que ayude a colocarlos, a identificar sus propósitos, estrategias y acciones, así como valorar sus alcances e interrelaciones. En segundo lugar, aspirar a vislumbrar las oportunidades y debilidades de las instancias municipales y sus distintas comunidades de articular estrategias y crear espacios para el crecimiento de las capacidades de participación en la toma de decisiones de los distintos actores presentes en sus escenarios de acción. No pretendemos, por supuesto, agotar asuntos de tanta complejidad; solamente brindar unas notas para la discusión…”
¿Qué significa hablar correctamente? ¿Podemos considerar un patrón superior que no tiene en cuenta diferencias y particularidades o se trata más bien del patrón de un grupo social, de una región, de un grupo étnico-racial, de una condición urbana o rural? ¿Los medios de comunicación masiva, la escuela, los espacios comunitarios, la difusión de la música popular, afectan, facilitan o entorpecen el desarrollo de criterios adecuados en relación con el habla? ¿La enseñanza del español, el cuidado de las normas, en la escuela, en la familia, en los medios de comunicación, se han visto afectados por la crisis de los últimos años? ¿Cómo los cambios que han ocurrido en los espacios sociales configuran la formación del habla popular y las normas sociales?
“He decidido poner en el centro del análisis las más notables vacuidades y falsificaciones que se han tejido sobre la democracia y sobre otro concepto extraordinariamente rico y también vulgarizado: el de república. Es sorprendente comprobar cómo incluso políticos, politólogos y juristas que se califican de izquierdistas son víctimas de las manipulaciones y adulteraciones establecidas al respecto. Creo que en las condiciones del mundo de hoy, y en medio de la todavía imperante desorientación de las izquierdas, es un esfuerzo que vale la pena. Es justo empezar a descorrer los telones y evitar que se siga llamando democracia a un verdadero desmedro de la voluntad popular, como está ocurriendo en la práctica y en el pensamiento político del mundo occidental…”
(Fragmento de un ensayo mayor, presentado en el Festival de Cine de San Sebastián, 2003) “El caso de Fernando Pérez no deja de resultar, cuando menos, extravagante. Lo envidiable de su obra está en esa disposición para recuperar aquella radicalidad perturbadora que hizo del cine cubano, hacia la sexta década del siglo anterior, un prototipo insospechado de creatividad, sin que el gesto signifique un proceso regresivo. Y es más sorprendente aun cuando se recuerda que sus dos primeros filmes (Clandestinos, 1989; Hello, Hemingway, 1990), lo anunciaban como un director más bien con preferencias por el cine de género.
“El concepto de “movimientos sociales” originado en los años 60 y los 70, incluye desde los movimientos contra la opresión de la mujer, los negros, las lesbianas, los gays, hasta los relacionados con la ecología, el desarme y otros. La idea de que solo quienes sufren una forma específica de opresión son capaces de definirla o de luchar contra ella, es medular en esta estrategia para el cambio social, que recientemente ha sido llevada a sus últimas consecuencias mediante el desarrollo del concepto de «política de identidad». Según este razonamiento, se deduce que cada grupo de oprimidos debería poseer un movimiento propio, inequívoco y separado que, por tanto, tiende a organizarse sobre bases de «autonomía» e independencia, entre ellos mismos y respecto al movimiento socialista. También manifiestan la tendencia a organizarse con independencia de las diferencias de clase. Pero esta lógica es errónea…”
“La labor de las mujeres en la política actual no ha sido un favor que los políticos les han hecho ni algo que naturalmente se dé en los sistemas democráticos. La democracia, como la conocemos, ha sido muy restringida. Si para los griegos existía solo entre los ciudadanos varones, con la exclusión de los extranjeros, los esclavos y las mujeres, en la época actual la resistencia a la participación política de las mujeres en los gobiernos es muy grande. Durante muchos años, las mujeres, salvo raras excepciones, no han participado en el poder político. Esto ha cambiado gracias al movimiento feminista y, en general, los movimientos de mujeres…”
“Son muchos los aspectos que el tema del aborto acarrea, tales como los derechos humanos, los sociopolíticos; los bioéticos, médicos, morales, filosóficos, legales, las perspectivas feministas y las «pro-vida». Aunque este artículo no pretende entrar en el debate de si el aborto es o no moralmente justificable o si es o no justo en ciertos casos, sí desea tratar estos temas desde la perspectiva argentina. No obstante el hecho de que su autora es feminista y apoya el derecho al aborto para toda mujer que lo decide, por la razón que sea, la información aquí presentada proviene de varios estudios llevados a cabo con absoluto rigor. Por consiguiente, no será una perorata a favor del aborto, sino un cuadro de la realidad que viven las mujeres argentinas”.
“La lucha por la igualdad social entre hombres y mujeres se ha puesto de manifiesto a lo largo de los siglos en diversas ocasiones y bajo formas diferentes. Históricamente han aparecido grupos defensores, tanto ideológica como políticamente, de su necesidad, reconocidos, en sentido general, como movimientos feministas. El feminismo no solo se expresó en movilizaciones sociales y políticas, sino que también elaboró teorías para explicar por qué las mujeres estaban discriminadas. En la actualidad estas reflexiones son las que han originado las propuestas acerca de qué se debe cambiar y cuál debe ser el papel del Estado para impulsar estos cambios a través de sus políticas públicas…”
(Premio Temas de Ensayo 2003 en la modalidad de Humanidades) “Aunque la abundancia de textos que examinan al cine cubano pudiera sugerir lo contrario, no existe entre nosotros una verdadera diversidad de enfoques historiográficos. Quiero decir, hay abundancia de libros y artículos, mas todos se parecen en aquello que enuncian, resultado de que casi todos han escogido el mismo método para aproximarse a los hechos. El grueso de nuestros estudios sobre cine cubano prescinde de la especulación teórica, y le concede la máxima y única jerarquía de valor a la apreciación fáctica, como si el dato en sí fuera capaz de avalar «científicamente» aquello que se intenta describir o demostrar...”
(Premio Temas de Ensayo 2003 en la modalidad de Ciencias sociales) “Reconstruir el proceso de formación de la dimensión ontológica del ciudadano cubano tiene mucho que ver con establecer, aunque sea de alguna forma, su manera de pensar, de ver las cosas, de relacionarse con su mundo espiritual y material. Para esto es necesario apreciar los procesos en que se ve envuelto socialmente y en los que se forman sus estados de conciencia, estructurados sobre valores y convicciones que son parte esencial del modelaje de su conducta política. Incursionar en este asunto incluye cuestionarse en todo momento lo que pudo ser, lo que es, o será el ciudadano cubano y, por supuesto, explorar las circunstancias en las que se desarrollan sus expectativas y metas de realización, como también los retos y escollos que enfrenta…”
“Metafóricamente hablando, los soviéticos eran para nosotros algo así como el hermano mayor cuyos bíceps nos hacen sentir orgullosos del parentesco, por enclenques que seamos. Cuando solo podíamos soñar con viajes al cosmos y con la energía nuclear, ellos ya los tenían. Y para los habitantes de una islita casi en el traspatio del imperio del dólar, eso vale mucho. Aunque sea, como dirían los psicólogos --¿o eran los economistas--, en forma de capital simbólico. Las huellas históricas de la presencia de la Unión Soviética en este proceso nuestro no las discute nadie. Sobre todo en los primeros años, la supervivencia de la Revolución habría sido problemática sin la mano que nos echaron…”
Este comentario se enfoca en dos textos centrales para profundizar en la temática vinculada con el Caribe, sobre todo en una coyuntura mundial de reformulación geopolítica y geoeconómica, caracterizada por la hegemonía estadounidense, y en la ruta hacia la construcción de una nueva arquitectura global. Se trata de El Caribe: región, frontera y relaciones internacionales, libro coordinado por Johanna von Grafenstein Gareis y Laura Muñoz Matta y La ayuda militar como negocio: Estados Unidos y el Caribe, de Humberto García Muñiz y Gloria Vega Rodríguez. Ambas obras aportan enfoques multifacéticos que se complementan en el tratamiento de la problemática caribeña.
“¿Puede la Iglesia católica romana, o cualquier otra, influir sobre las políticas nacionales e internacionales referentes a las drogas? La respuesta no está clara, pero existen evidencias de que la Iglesia católica en Latinoamérica lo está intentando como parte de su papel manifiesto como líder moral. Desde comienzos de los años 80, ha estado analizando de manera creciente el auge de la producción, el tráfico y el consumo de drogas, en un esfuerzo por recomendar políticas efectivas a gobiernos, organizaciones no gubernamentales, individuos, comunidades, así como a sí misma. Las políticas que las iglesias han recomendado tienden a contradecir algunas de las presunciones básicas gubernamentales, incluyendo el tema de la culpabilidad de los empobrecidos productores, así como la responsabilidad de los países donde la demanda es mayor…”
“Durante un siglo, Argentina fue una sociedad que avanzó en la integración de sectores crecientemente amplios de su población, creando la ilusión de una «sociedad abierta», que generaba amplias oportunidades de progreso, tanto para los individuos como para el conjunto social. En cambio, a lo largo de las últimas tres décadas, inauguró una tendencia contraria, señalada por la creciente des-ciudadanización de grupos sociales cada vez más numerosos. Ello no puede dejar de tener consecuencias de gran impacto sobre el modo de articularse las relaciones entre Estado y sociedad, y de construir legitimidad desde el Estado, que ya no puede apelar ni a la promesa de movilidad social ascendente, ni a los beneficios de una versión «pobre», pero eficaz, del Estado de bienestar…”
“La evolución de las relaciones entre la Unión Europea y América Latina, a partir de principios de los años 90, es un asunto importante desde el punto de vista estratégico porque, en el contexto de la globalización, podría implicar una modificación potencial de las relaciones de fuerza a escala internacional. Esta es la hora de la reconquista o de la consolidación de los mercados. Los intereses económicos, financieros, comerciales de los Estados Unidos y los de la UE se oponen en el continente latinoamericano, aunque sus estrategias y su orientación neoliberal sean, en el fondo, equivalentes…”
La mujer ha ido ganando, a través de los tiempos, lugares cada vez más significativos en el espacio público. Y cuando ese espacio incluye tareas de dirección, ya sea en el ámbito social o político, o en las áreas productivas, las dificultades se multiplican. Temas sometió un breve cuestionario a un nutrido número de mujeres que, por su propia experiencia, pueden hablar de esas dificultades y de las características distintivas de la dirección femenina.
(Reseña de La participación. Diálogo y debate en el contexto cubano, compilado por Cecilia Linares, Pedro E. Moras y Yisel Rivero) “Se trata de dieciocho textos de especialistas que, de una u otra forma, se han acercado no solo a los referentes teóricos, filosóficos y éticos de la participación, sino a sus expresiones en el contexto cubano. La participación. Diálogo y debate en el contexto cubano propicia un lugar para las preguntas, al tiempo que consigue informarnos algunas de las posiciones que sobre este tema se desarrollan en Cuba, cuyo impacto en nuestras maneras de convivir es más esencial de lo que a veces sospechamos…”
¿Qué es el entretenimiento? ¿Qué formas de uso del tiempo libre constituyen lo que podría definirse como entretenimiento? ¿Será que la experiencia cultural ligada al entretenimiento se diferencia de la no ligada en que la primera es para «pasarla bien», y la segunda requiere un esfuerzo que no necesariamente está relacionado con un goce o un placer físico o psíquico? ¿en qué medida el entretenimiento promueve valores culturales? ¿Esos entretenimientos «no culturales» no están definiendo una forma de conducta, de comportamiento y de valores que son toda una cultura —y a veces una cultura más aplastante que la que se identifica aquí como la verdadera?
(Premio Temas de Ensayo 2004, en la modalidad de Estudios de Arte y literatura) “Las narraciones cortas de Cintio Vitier se comprometen con lo insólito, sin dar explicaciones o justificaciones a los hechos, sin recurrir a la magia o a la fábula, como sus antecesores. Los hechos siempre tienen un referente objetivo, y una pequeña vibración interna los conduce al sueño. Una vez allí, sin un acuerdo previo, adoptan una extrañeza particular, como si entraran en la dimensión onírica y no dependieran de ella, sujetos por una lógica interior que los hace transitar de nuevo hacia una variación de lo ignoto, una semántica que ni siquiera el desorden de un sueño puede explicar…”
“Al terminar la Guerra fría se vinieron abajo las nítidas fronteras entre los discursos ideológicos que ofrecían una visión de futuro y valores claramente diferenciados para grupos políticos y sociales. Para llenar gran parte de ese vacío, la gente se volvió hacia su «cultura tradicional», la reconstruyó o la inventó. Esta expresión ideológica de la supuesta superioridad cultural de la civilización tecnológica y científica occidental, basada en un enfoque reaccionario de la dialéctica hegeliana, enlaza, de manera paradójica, con el debate en torno al «fin de las ideologías»…”
“La producción de Severo Sarduy no puede entenderse en la fragmentación de cada uno de sus discursos, como tampoco en el todo, en el cuerpo homogéneo y funcional. Como en una catedral barroca observada desde lo lejos, detener la vista en una voluta es casi un imposible sensorial, tanto como atrapar el conjunto en fuga. Esto —tautología pura— significa que identificar su obra, elaborar una narrativa (una más) de sus procedimientos constructivos o temáticos, de su inserción en la literatura o de su evolución, sistematizar un cuerpo de análisis, es apelar al dibujo armónico de una identidad, y no al «reflejo pulverizado» del logos que pretende el neobarroquismo sarduyano…”
(Reseña de Rodar el coco. Proceso de cambio en la santería, de Lázara Menéndez) “Rodar el coco. Proceso de cambio en la santería, de Lázara Menéndez, permite entender cómo una particular identidad se extiende desde África por todo el Occidente, no solo en sus expresiones artísticas, sino en sus cosmogonías y sus más diversas connotaciones religiosas. Habla del papel que la diáspora africana ha desempeñado en la expansión occidental de tales valores culturales y religiosos nacidos en África y preservados fuera de allí, a golpe de ocultamientos, simulacros, negociaciones y renovaciones que los han convertido en nuevos productos, ideas, cosmovisiones y culturas…”
“Escribir este artículo ha significado para mí un desafío para pensar en puentes entre la historia ambiental y la ecología política, y el vasto campo inexplorado que representa la agroecología. De la misma forma que la ecología política, la agroecología debe mantener una vigilancia reflexiva sobre su propia práctica. No pueden devenir nuevos dispositivos despóticos inapelables. Su herencia plural no debe cristalizarse en un saber «técnico», autorreferente, supuestamente aislado de las demandas y necesidades sociales…”
“Desde hace más de trescientos años, el desarrollo agropecuario del país se ha producido contra nuestros recursos naturales, principalmente la vegetación, el suelo agrícola y el agua. No podemos excluir de este proceso que el modelo de desarrollo en esa esfera productiva, desde 1959 hasta hace solo quince años, haya operado igualmente en detrimento de estos, al mantenernos dependientes en la alimentación, y con un alto grado de vulnerabilidad, dándole continuidad a un problema acumulado y comprometiendo el futuro…”
“Este texto no pretende agotar el tema de la energía en la agricultura, sino solo discutir algunos aspectos conocidos –y otros a veces no tan obvios– en la formación de una cultura energética. En la agricultura se utiliza la energía proveniente de muchas fuentes y en sus diversas manifestaciones. Pero la agricultura también ayuda a su generación. La economía tradicional solo se interesa por los recursos escasos. Sin embargo, los abundantes y al alcance de todos –la luz solar, el viento, el aire y el agua–, para que sean verdaderamente eficaces, deben restringirse tanto en su acceso como en su uso, o distribuirse a través de mecanismos de regulación…”
“El 40 aniversario de la edición de «El socialismo y el hombre en Cuba» ha sido una ocasión propicia para repasar algunos problemas planteados por el Che, desde la perspectiva de su significación y actualidad. Escrita en 1965, esta carta-ensayo cuestiona y analiza diversas facetas de la transición socialista, desde la experiencia de una práctica revolucionaria y un pensamiento político maduros. En esta pequeña encuesta me he propuesto contribuir, en alguna medida, al conocimiento de un material bastante ignorado, especialmente por las jóvenes generaciones, de las que formo parte…”
(Mención en el Premio Temas de Ensayo 2004, en la categoría de Ciencias sociales)
“Con la Revolución cubana, los marcos del modelo de la institucionalidad democrática burguesa y de la idea prevaleciente sobre la democracia, el papel del intelectual como élite letrada y la propia concepción de la cultura, fueron desbordados por los nuevos habitantes de la ciudad política. La pérdida del respeto hacia ciertos valores del pasado propició, sobre todo, la rebelión cultural contra la propiedad privada y la caída de toda la fuerza simbólica que podía denotar aún aquella democracia representativa. Una nueva cultura en Cuba se iría creando por la ruptura de las jerarquías sociales: la igualdad como valor, el reconocimiento del derecho a la propiedad sobre la tierra y la vivienda a grandes segmentos poblacionales, la apropiación de la ciudad como espacio público real, la salida de los y las adolescentes del claustro familiar y su entrada masiva al ruedo de lo social, la universalización de la enseñanza, la relativa nivelación de los ingresos, la socialización de la economía, etc…”
(Reseña de Un hombre solo y una calle oscura, de Rufo Caballero, Ediciones Unión, La Habana, 2005)
“Caballero ha expandido el aliento y cobrado (recobrado) un tono que siempre fue el suyo: el relampagueo de las ideas en sincronías jugosas, y de las formas expresivas que identifican al ensayismo genuino. Un hombre solo y una calle oscura, título con el que alude a la arquetipicidad imaginal de todo un género (yo diría más: todo un orden artístico), se constituye en uno de esos ensayos que cortan la respiración porque comprometen nuestro juicio acerca de las realidades finales de la conducta…”
Panel dedicado a la caracterización de la cultura política existente en Cuba después del golpe de Estado de 1952 y justo antes del 26 de julio de 1953; es decir, cuáles eran los valores, la opinión pública, las actitudes hacia los problemas de la esfera pública, el consenso, la movilización de la sociedad civil y en qué contexto internacional tenían lugar estos fenómenos.
“En este ensayo afirmo que la tendencia dominante del liberalismo político no ha dado origen a la «paz perpetua» de los Estados liberales ilustrados, sino que se basa, en última instancia, en una lógica irreduciblemente conflictiva de amigo-enemigo, que exige y legitima el poder unitario…”
Este panel discute la problemática del consumo en sus dimensiones económica, social y cultural. ¿Cómo se genera el consumo en el mundo contemporáneo globalizado? ¿En qué medida el consumo tiene una significación directa en los grupos sociales, según sus diferencias? ¿Hasta qué punto es algo extensible al mundo entero de acuerdo con las características del sistema social?
“El proyecto de los derechos humanos ofrece la posibilidad de emplear la ley como un medio para el cambio social partiendo del compromiso con los valores humanitarios a escala global. Este proyecto aborda la difícil situación de un elevado número de hombres, mujeres y niños, víctimas de la violencia en el ámbito nacional o cuyas vidas se ven seriamente afectadas por las políticas neoliberales del capitalismo internacional. Ello se manifiesta de manera más clara en las crecientes desigualdades en el acceso a la salud, la disminución de las políticas sociales y el aumento de la injusticia social…”
(Reseña de La magia del laberinto, de José Alberto Lezcano, Ediciones Loynaz, Pinar del Río, 2005)
“José Alberto Lezcano muestra uno de los pensamientos más serios, sólidos y refinados que se dejan sentir hoy en el discreto panorama de la crítica de cine en Cuba. Durante no pocos años, este maestro ha publicado sus artículos y ensayos en la revista Cine Cubano; pero es ahora que nos entrega su primer libro: La magia del laberinto, de una madurez analítica y especulativa fuera de la menor duda…”
“A Carilda Oliver Labra se le ha asociado en ocasiones con una serie de símbolos sexuales. Semejante aproximación no toma en cuenta la calidad de su poesía. Lamentablemente, la mayor parte de la crítica ha suscrito esa visión, calificando su quehacer de erótico cuando no de cursi, y llegando a compararlo con la novela rosa, el folletín radial o la telenovela. Esa perspectiva no presta atención a otro elemento clave de su obra, y que debe tener muy presente la crítica feminista que buscamos desarrollar: que la poesía de Oliver Labra no deviene solo profundamente feminista sino también antimperialista, contraria al neocolonialismo que ha afectado a Cuba a lo largo y ancho del siglo XX…”
“El pensamiento político cubano ha gozado de un alto nivel de desarrollo y profundidad. Pero no ha sido común entre nosotros la existencia de una reflexión metateórica en este campo. Es decir, un tipo de pensamiento que convierta sus propios fundamentos teóricos en objeto de reflexión, que los explicite e intente consolidarlos y desarrollarlos. En la Feria del Libro de 2006, la Editorial de Ciencias Sociales presentó el volumen Poder-saber: una ciencia política de la liberación, de Hiram Hernández Castro. Es una obra que amerita una reflexión por dos razones. Primero, que es un texto sobre la ciencia política. Añadamos que su autor pertenece a la más joven generación de científicos sociales cubanos. Dos elementos, a mi juicio, esenciales para establecer los méritos de este trabajo…”
¿Cómo explicar Temas a quien no la conozca? ¿En qué medida el nivel del análisis y el debate críticos de la revista se han podido sostener en el tiempo? ¿Cómo medir su alcance, dentro y fuera de Cuba? ¿Cuáles han sido sus limitaciones e insuficiencias? ¿Cómo cumplir plenamente su misión en el presente y futuro inmediato? Colaboradores, acompañantes, lectores, usuarios, miembros de la familia de Temas desde sus inicios e incorporados en el camino, junto al público asiduo al espacio Último Jueves, juzgan e intercambian impresiones acerca del proyecto de la revista, a los veinticinco años de su primer número.
(Premio Temas de Ensayo 2019. Ciencias Sociales) “¿Cuál podría ser la relevancia de la perspectiva de los derechos humanos, de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño, cuando es evidente la enorme brecha que los separa de la posibilidad de su ejercicio en estas regiones olvidadas por las administraciones centrales e inabordables para las instituciones locales, que se ven ampliamente sobrepasadas por la magnitud de las problemáticas que atraviesan estos infantes «en situaciones de vulnerabilidad»? Estas reflexiones se encuentran en el origen del presente ensayo, así como permanecieron durante los años que pasé en la frontera, tratando de comprender algunas de las aristas que permean y constituyen la trama social en los bordes materiales y simbólicos de nuestra sociedad.
Este artículo recorre las fértiles polémicas que, en los años 60 del siglo XX, giraron en torno a las políticas culturales cubanas.
“La realidad del trabajo doméstico remunerado está marcada por múltiples tensiones que provienen de sus características particulares: se desarrolla en la privacidad de un hogar, se convive con una familia ajena, para la cual se realizan tareas continuas, imprescindibles pero menospreciadas. Este ámbito favorece situaciones discriminatorias, de violencia verbal e incluso de cierta explotación del trabajo que sobrepasa los límites de cualquier jornada laboral. Estamos en presencia de una actividad difícilmente visualizada a nivel social, debido a su aislamiento, carente de relaciones asociativas y desprovista de amparo legislativo…”
José Martí vivió en tiempos de transformaciones tecnológicas espectaculares, en tiempos de grandes avances científicos, los cuales siguió de cerca y buscó la manera de dar a conocer en «nuestra América». Desde su posición ética, comprendió la importancia de tales adelantos, pero estos debían ser puestos en función del bien de la humanidad. La ciencia y su desarrollo no podían ser coto de privilegiados, sino estar al servicio del ser humano.
Realizar la edición crítica de las obras completas de un autor determinado es un método idóneo para llegar a conocerlo profundamente. Una edición crítica es una aproximación totalizadora al autor, su obra y su tiempo. El nivel de complejidad de este proceder investigativo, su enfoque interdisciplinario, nos lleva al trabajo en equipo. En este artículo se valora la experiencia al respecto en la edición crítica de las Obras completas de José Martí.
Se reseña el libro de Rosa Marquetti Torres, Chano Pozo, la vida 1915-1948, de la Editorial Oriente, Santiago de Cuba, 2018. Al decir del reseñador: «El texto de Marquetti no abunda simplemente en los intersticios de una historia de vida compuesta por datos biográficos, fechas y otros elementos de carácter empírico; por el contrario, estamos en presencia de una profunda valoración de la obra artística del mítico timbero cubano».
“La socialdemocracia europea ha sido considerada uno de los pilares básicos sobre los que se ha desarrollado la historia política del llamado viejo continente y la actividad revolucionaria del movimiento de izquierda a nivel internacional. Sin embargo, esta corriente política, ha transitado por una serie de vicisitudes que cuestionan su condición de ser una fuerza de izquierda. En los momentos actuales, un análisis medianamente profundo de este tipo de cuestionamiento parece ir más allá de una simple valoración de coyuntura y puede responder a causas de carácter estructural y funcional del sistema político que ha condicionado su propia existencia…”
“A principios de 2006, The New York Times convocó a doscientos críticos, escritores, editores, autoridades del mundo literario para que eligieran la mejor obra de ficción de los últimos veinticinco años en los Estados Unidos. La primera posición, como se esperaba en ciertos círculos, correspondió a Beloved, de Toni Morrison. No obstante, no es propiamente el contenido de la encuesta lo que me interesa examinar ahora, sino un momento del debate que tuvo lugar más tarde en las páginas del diario digital. Después de publicados los resultados de la encuesta, The New York Times invitó a dos novelistas (Jane Smiley y Michael Cunningham) y dos críticos (Stephen Metcalf y Morris Dickstein), para que durante cinco días intercambiaran, en directo, sus impresiones sobre el sondeo a manera de foro on line…”.
En la contemporaneidad, el desnudo masculino adquiere otras connotaciones dentro de los discursos de resistencia; hecho vinculado principalmente a las cuestiones de la identidad sexual: el arte queer; visualidad que aborda las complejas transacciones entre sujeto-cuerpo-identidad. Desde la academia se percibe un mínimo de su abordaje en el área del Caribe. Por ello, el presente trabajo analizará la visualidad queer a partir del desnudo erótico masculino y desde la fotografía. Manifestación artística que también carece de atención investigativa en el área que nos ocupa. En particular, esta propuesta toma como referentes la producción artística de dos avezados fotógrafos sobre el tema, el haitiano Josué Azor y el cubano Eduardo Hernández Santos. En esa dirección, se pretende establecer coordenadas críticas de una temática contemporánea, e innegable en la praxis fotográfica de la región, y de contribuir a llenar ciertas lagunas de saberes en nuestro ámbito académico.
En los años 40, el Partido Socialista Popular (PSP), nombre recién adoptado por el Partido Comunista, mostró una opción socialdemócrata en la Cuba republicana. Son examinados tres de sus rasgos: 1) la trayectoria coalicionista del PSP, aliado de Batista y después de Grau, y de las izquierdas y las derechas; 2) la acción eficaz del PSP por promover cambios sociales en relación con las relaciones raciales y entre clases; 3) la apertura policlasista del PSP en aquel contexto, dispuesto a entablar alianzas con la que llamaba la burguesía nacional. Además de estas razones, fue de sesgo socialdemócrata porque era un partido de afiliados y simpatizantes, no meramente uno selectivo de cuadros; prefería operar en la legalidad; participó en elecciones libres y competitivas, sin pretender convertirse en partido único; aceptó sus derrotas electorales; fue respetuoso de las reglas de competencia y de convivencia política.
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